La crisis sanitaria mundial, ha desencadenado la saturación de las instalaciones del sector salud a nivel nacional, dando como resultado que proyectos de implementación de soluciones modulares crezcan desmesuradamente para el beneficio de dicho rubro junto a la reactivación de la minería y logística. Con una enfermedad tan agresiva como el COVID, construir un hospital demoraría meses, al utilizar una nave modular, el hospital podría estar listo en semanas.
Por otro lado, existe una gran demanda en la implementación de almacenes para las empresas del sector retail, ya que el negocio de comercios online aumentó y más que un local de ventas, se necesitan mejoras en el área logística para el despacho. Esto con la finalidad de que los operadores del rubro aprovechen las construcciones modulares para aumentar su capacidad de almacenaje a la vez.
“Una nave modular es una solución destinada a poder montarse y desmontarse varias veces sin pérdidas de material, de manera temporal, a corto o largo plazo, en cualquier lugar, de forma autónoma y destinada a diversos fines. Se fabrica con perfiles de aluminio, elementos de ensamblaje, tensión y anclaje de acero galvanizado. Se trata del montaje de una instalación para diferentes usos como: Albergues, oficinas, talleres o comedores”, comentó Néstor Rodríguez, gerente de ventas de Estructuras Marfil Perú, empresa especializada en soluciones estructurales.
Sectores de implementación modular durante la pandemia
Cada vez más se efectúan medidas de contención para mantener el bienestar de la salud de las personas. Los campamentos mineros se caracterizan por estar ubicados en zonas remotas, con alturas extremas y climas adversos. Eso lleva a tener una especial preocupación por las condiciones de infraestructura y habitabilidad de sus colaboradores. Para la industria minera, existen diversos tipos de campamentos tales como los de tipo contenedores, carpas tipo iglú, estructuras modulares a dos aguas, entre otros.
Estructuras Marfil, ha realizado diversos trabajos para la industria minera donde se implementa el montaje de una instalación que no requiere de cimentación. “Continuamos realizando proyectos para las industrias más golpeadas por la crisis, implementando soluciones modulares, estructuras que resisten cargas de viento de más de 150 kilómetros por hora, nieve o lluvia y donde las medidas dependerán de la necesidad del cliente”, añadió Rodríguez.
En este año, la compañía también realizó en el tiempo de una semana el montaje de los hospitales covid temporales en diferentes puntos del país como en Piura, Sullana, Iquitos y Huaraz (7,000 m2).
La estrategia de crecimiento en el 2021 de la compañía en el país se enfocará en los productos de renta, cuya importancia ha crecido en el último año. Asimismo, Marfil Perú inició operaciones en la ciudad de Arequipa con la finalidad de cubrir la demanda en el rubro de operadores logísticos, agroindustriales y minería de aquella zona.
