En los últimos tiempos, hemos visto una mayor conciencia de las empresas sobre su responsabilidad de formar equipos que garanticen la representatividad y proporcionalidad de las sociedades en las que opera su negocio. Este movimiento ha hecho que las empresas inviertan en la creación de grupos de afinidad, realicen eventos de sensibilización, participen de círculos de diálogo con otras empresas y asociaciones e incluso contratar profesionales dedicados para abordar el tema internamente.
Teniendo en cuenta los avances logrados, debemos reconocer que este proceso forma parte de un viaje más amplio, con una mirada estratégica considerando los ajustes de manera continua.
Para avanzar, las empresas necesitan revisar sus procesos, políticas y prácticas. Evaluar cómo están funcionando sus indicadores demográficos y se ha promovido una cultura inclusiva en todas sus interacciones con las audiencias de relaciones. Es decir, la diversidad, equidad y la inclusión deben considerarse directrices estratégicas para la empresa y no de un área o un grupo, sino más bien de manera transversal y multidisciplinario.
En este sentido, el liderazgo desempeña un papel fundamental para que el tema esté en la agenda sistemáticamente y dé visibilidad a través de una comunicación continua que crea comprensión y convicción de que la empresa es coherente con su visión y sus actos que demuestren los cambios de manera constante.
Un liderazgo involucrado en Diversidad e Inclusión es aquel que está dispuesto a aprender, que reconoce que no lo sabe todo, no tiene todas las respuestas y que necesita reinventarse constantemente. Así que se debe tener claro que no se podrá trabajar de forma individual y siempre se debe escuchar a las personas. De esta manera, comienza a construirse una cultura inclusiva, cada vez con más humildad, apertura a lo nuevo, sensibilidad y compromiso, evolucionando las acciones dentro del entorno corporativo.
Estos cambios no se producen por sí solos, por lo tanto, es importante que los líderes reconozcan el papel de las acciones afirmativas e intencionales en sus procesos de gestión para que los patrones de desigualdad, reproducidos en la sociedad, no se repitan dentro de las empresas. Tener una postura abierta a lo diferente y lo nuevo es primordial si pensamos que es mucho más fácil contratar y dirigir a personas más como nosotros o que piensan como nosotros y tienen las mismas creencias. Es por eso que es tan desafiante; requiere un esfuerzo de nuestra parte para revisar nuestros sesgos, reconocer los prejuicios y deconstruir estereotipos.
Me gusta mucho una cita de la autora nigeriana llamada Chimamanda Ngozi Adichie que dice: “La historia única crea estereotipos, y el problema de los estereotipos no es que sean mentiras, sino que están incompletos. Hacen que una historia se convierta en la única historia”.
Dentro de mi experiencia profesional en el área de Diversidad e Inclusión, he tenido el privilegio de aprender de manera diaria y animo a otros a hacer lo mismo; el pasado 13 de julio, participamos como empresa en un webinar, invitados por Avanza Inclusión, donde compartimos experiencias, conversamos y también debatimos sobre lo que significa la inclusión laboral y sus beneficios, curiosamente, todos llegamos a la misma conclusión, de la importancia que tiene el incluir a los grupos de trabajo a personas en situación de discapacidad, ya que independiente de que tengan alguna discapacidad, son capaces y enriquece y promueve la diversidad en la formación de equipos de alto rendimiento. Creo que es vital dar una oportunidad de tener empleo, capacitar personas, hacer ajustes razonables, trabajar en equipo, lo que por un lado genera un mejor clima laboral y además, un mayor compromiso.
Desde nuestra experiencia, seguimos promoviendo e invitamos a apoyar a aquellas empresas que están en proceso de ser más inclusivas.
¿Qué quiero decir con todo esto? Que se debe practicar la escucha activa y la empatía todos los días con nuestros colaboradores y colaboradoras. Que los avances que estamos realizando en el mundo corporativo forman parte de una gran red que estamos tejiendo juntos (profesionales, empresas, sociedad y funcionarios gubernamentales), que desempeña un papel esencial en el liderazgo para plasmar la inclusión dentro de las empresas.
La Gerencia General y la Gerencia de Diversidad e Inclusión se aseguran de que esté en la agenda e impulsen esta transformación. Al final del día los líderes del equipo aceleran el proceso y lo hacen realidad. ¡Atrévete, reflexionemos y actuemos juntos para seguir contribuyendo! Juntos llegamos más lejos.