Registró un EBITDA de USD 3.800 millones en 2018, un 8% más que en 2017.
La transformación de A. P. Moller – Maersk progresó en 2018. Sus clientes se beneficiaron de soluciones integrales, soluciones digitales y mejoras en la red. Desde 2016, los ingresos han crecido en un 43%, a USD 39.000 millones en 2018, un volumen de negocios adicional de USD 12.000 millones.
Al respecto, Søren Skou, CEO de A.P. Moller – Maersk, manifestó: “En 2018, hubo un progreso significativo con la implementación de nuestra estrategia. Con la separación de Maersk Drilling y su cotización en bolsa prevista en abril, la separación de nuestros negocios relacionados con la energía estará casi completa. Hemos integrado con éxito a Hamburg Süd, acelerado nuestra transformación digital y hemos integrado los departamentos de ventas, servicio al cliente, delivery y producto bajo una sola compañía con nuestros clientes al corazón de la empresa. Estamos comenzando a ver crecimiento tanto en el segmento marítimo (Ocean) como en el segmento no marítimo (non Ocean),”.
La rentabilidad estuvo en línea con las proyecciones más reciente para 2018, con beneficios antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (EBITDA) de USD 3.800 millones, un 8% más que en 2017. La mejora en beneficios brutos fue impulsada por el incremento en las tasas de flete, eficiencias obtenidas de la integración de las actividades continuas y sinergias debido a la adquisición de Hamburg Süd. No obstante, los márgenes en las actividades continuas estuvieron bajo presión y el EBITDA fue más bajo de lo que se esperaba inicialmente a principios de año, principalmente debido a un aumento en los precios del combustible (bunker) lo cual no se compensó en su totalidad con el alza en las tasas de flete.
Søren Skou puntualizó que aunque tuvieron un inicio desafiante en 2018, “al observar nuestro desempeño financiero, aumentamos los ingresos a pesar de que los precios del combustible fueron significativamente más altos y el crecimiento del volumen de contenedores fue menor al esperado en la segunda mitad de 2018. Aun así, la rentabilidad tiene que mejorar”.
Durante 2018, la deuda financiera neta se redujo significativamente de USD 14.800 millones a USD 8.700 millones y la compañía mantiene su grado de inversión.
Tras la cotización en bolsa de Maersk Drilling mediante la separación anunciada y sujeto al mantenimiento de la calificación de grado de inversión, los detalles sobre la política futura de dividendos, la estructura de capital y la distribución de una parte significativa de los ingresos de la venta de Maersk Oil se anunciarán a más tardar en agosto de 2019.
Expectativas para 2019
A partir de 2019 y en adelante, se aplicará la Norma Internacional de Información Financiera 16 (International Financial Reporting Standard 16 – IFRS por sus siglas en inglés) 16. La IFRS 16 implica que los contratos de arrendamiento de más de 12 meses se incluirán en el balance como activos y pasivos.
Para 2019, Maersk espera ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (EBITDA) de alrededor de USD 5.000 millones incluyendo los efectos de IFRS 16, y alrededor de USD 4.000 millones al excluir los efectos de IFRS 16.
Se aguarda que el crecimiento del volumen orgánico en el segmento marítimo (Ocean) este en línea con el crecimiento promedio estimado del mercado de 1 – 3% en 2019. La orientación sobre inversiones de capital (CAPEX) es en torno a USD 2.200 millones y se espera una alta conversión de efectivo (flujo de caja de operaciones comparado con EBITDA).
La orientación de Maersk para 2019 está sujeta a incertidumbres considerables debido al riesgo actual de mayores restricciones en el comercio mundial y otros factores que afectan las tarifas de transporte de contenedores, los precios de combustible y las tasas de cambio.