Cuando hablamos del mercado de capitales, lo primero que nos viene a la mente es rentabilidad y volatilidad, pero este mercado considera otros aspectos como: plazo de la inversión, perfil de inversionista, apetito al riesgo, agentes que participan (sociedades agentes de bolsa, calificadoras de riesgo, estructuradores, etc), Superintendencia de Mercado de Valores, Bolsa de Valores de Lima, CAVALI, diversificación y expectativa del recurso.
“Es por ello que el mercado de valores es una alternativa no solo de inversión para personas y empresas, sino también de fuentes de financiamiento para las entidades que requieren financiar proyectos (emisión de bonos o acciones) o de liquidez (papeles comerciales)”, indicó Edmundo Lizarzaburu, profesor de la carrera de Administración y Finanzas de la Universidad ESAN.
El experto en finanzas personales, explicó que los principales instrumentos (título valor) que se pueden encontrar son básicamente dos: los instrumentos que representan capital, como las acciones (instrumentos de renta variable) y los que representan deuda (bonos, conocidos como renta fija y los papeles comerciales).
Asimismo, el docente de la Universidad ESAN, afirmó que en la actualidad, el mercado de valores peruano se encuentra en “proceso de maduración”, si bien el volumen de negociación es inferior a sus pares del Mercado Integrado Latinoamericano (MILA); donde participan Chile, Colombia, México y PERÚ, diversos agentes tales como los Fondos Mutuos o las mismas Sociedades Agentes de Bolsa vienen buscando ofrecer diversas alternativas para promover más el uso del mercado de capitales (portafolios compuestos por acciones o bonos de diversos sectores o proyectos, entre otros).
Agregó que el mercado de valores también puede ser considerado para:
- Ahorro, dependiendo del perfil, el título valor y el plazo. Los retornos pueden ser superiores a los de un depósito a plazo (también un riesgo mayor, lo que puede generar claramente la posibilidad de pérdida).
- Mecanismo de cobertura y especulación (derivados/opciones listadas), como ocurre en otras plazas internacionales (incluidas las del MILA) y que todavía no se ha desarrollado en el mercado peruano.
Lizarzaburu dijo que esto representa una buena oportunidad para el país, pero que todo lamentablemente está relacionado a otras variables, siendo una de ellas el ruido político y si este no se reduce de manera importante, podría ocurrir que las proyecciones de diversos agentes se cumplan, es decir:
- Poca inversión. Que hace que el valor de las empresas no aumente, porque el flujo futuro de ingresos no aumentaría de manera representativa.
- Reducción del ahorro. Que representa menos recursos para ser invertidos en instrumentos.
- Mayor volatilidad cambiaria. Que impacta no solo a los importadores y exportadores, sino a todos los ciudadanos y a los inversionistas por la conversión de sus inversiones en soles a dólares, lo que les podría restar rendimiento real.
Finalmente, Lizarzaburu concluyó que si tenemos un mercado que tiene para desarrollarse, se debe asegurar que ello se pueda dar para diversificar las fuentes de financiamiento, inversión, cobertura y ahorro, es decir, buscar contribuir con un mayor crecimiento.