Sustentabilidad: el viaje no es el fin, sino el camino

Por: Carolina Borzatto, Directora de Marketing de SAP Concur para América Latina

Cambian las restricciones, los requisitos, se reprograman los vuelos, pero lo que no cambia son las ganas de viajar. Elegir aerolíneas con programas de compensación y reducción de emisiones, hoteles con certificaciones y transportes más sostenibles son solo algunas de las iniciativas que están tomando más fuerza en toda Latinoamérica.

Analizando las soluciones implementadas por nuestros clientes y qué es lo que se está haciendo en las diferentes industrias descubrimos ocho buenas prácticas para estar alineados al negocio y potenciar la sustentabilidad en las organizaciones, potenciando las oportunidades e involucrando a colaboradores y toda la cadena de valor.

En primer lugar, es clave contar con el apoyo de ejecutivos Nivel C para lograr los objetivos que se planteen a toda la compañía. Los viajes sustentables suelen tener mayores costos, además de que el simple hecho de viajar ya genera emisiones, por lo que es recomendable analizar cuándo viajar, que sea un viaje con propósito y establecer objetivos claros que luego se puedan medir a mediano y largo plazo. Un consejo práctico: sumar a la conversación a los viajeros y a los ejecutivos senior.

En segundo lugar, pensar en grande e ir más allá del viaje. Es importante planear a largo plazo, ya que la definición de la estrategia, su posterior comunicación e implementación pueden llevar varios meses y los resultados comenzarían a verse luego del segundo año. Un consejo práctico: a medida que la organización progrese en otras iniciativas de sustentabilidad, los viajes se convertirán en una parte más importante del total de las iniciativas.

Evitar el “ecoblanqueo” o greenwashing, por otro lado, es algo a considerar por las empresas no solo para preservar su reputación, sino también para generar un impacto positivo real en el entorno. Las acciones deben estar alineadas con el núcleo del negocio, poder medir sus impactos y respaldarlas con números y datos para mostrar a la organización y a la cadena de suministros que los esfuerzos realizados valen la pena. Un consejo práctico: es muy útil trabajar con las compañías que gestionan viajes corporativos (TMC, Travel Management Companies) para diseñar su programa y medir el éxito de sus programas.

Para impulsar y amplificar las iniciativas sustentables es posible aprovechar la iniciativa de los empleados. Siempre hay early adopters que buscan ser cada vez más sustentables en todas sus acciones, escucharlos para que puedan contagiar su pasión servirá para impulsar nuevos programas. En este sentido, de acuerdo con un relevamiento de SAP Concur, el 97% de los viajeros están preparados para invertir más tiempo de viaje en la búsqueda de opciones más sustentables. Además, cerca de 7 de cada 10 cree que volará mucho menos en 10 años debido a las preocupaciones medioambientales.

Comunicar de manera clara y frecuente también es una buena práctica a llevar adelante La comunicación abierta y honesta mantiene a los empleados comprometidos con la causa. Quieren conocer la perspectiva, comprender el enfoque, ver cómo funciona la estrategia y el impacto que están teniendo sus acciones. Para eso es fundamental mostrar los datos relacionados a la huella de carbono, la reducción en el consumo de agua y de emisiones por el cambio consciente de proveedores. Un consejo práctico: crear un grupo piloto que realice comentarios a medida que evalúa el programa y pueda sugerir ajustes, incentivos y nuevas políticas.

La sustentabilidad de los viajes puede ayudar a mejorar el reclutamiento y la atracción de los colaboradores, de hecho, el 79% de los viajeros de entre 25 y 39 años estaría más inclinado a trabajar para una compañía que priorice la sustentabilidad. Por ello es recomendable incluir al equipo de Recursos Humanos en la conversación. El viaje sustentable comienza con una cultura de compañía que valora, fomenta y recompensa las decisiones y comportamientos de triple impacto.

Incluir la sustentabilidad en las políticas y negociaciones con proveedores: es importante que la responsabilidad se extienda más allá de la organización, contratando a proveedores que colaboren con el cumplimiento de los objetivos. Algunos ejemplos que realizan muchas compañías actualmente es establecer políticas que prioricen los vuelos directos ya que utilizan menos combustible, los hoteles con criterios de alta sustentabilidad y fuentes de medición creíbles, así como establezcan límites a la cantidad de emisiones y kilometrajes a los autos de alquiler que utilizan los viajeros.

Por último, con tanta información disponible y cosas por hacer, es importante guiar a los viajeros en la dirección correcta mientras se realizan las reservas con consejos sencillos y elecciones claras, para ayudar a crear cambios a largo plazo en su comportamiento. Recompensar sus elecciones y mostrar los resultados de las acciones individuales y de equipo y su impacto contribuyen al negocio y al medio ambiente.

Las organizaciones tienen una responsabilidad clave a la hora de generar mayor concientización e iniciativas sustentables que generen menor impacto ambiental en el corto y largo plazo y los viajes constituyen un área clave. Adoptar estas mejores prácticas harán la diferencia en el mediano y largo plazo para hacer de nuestro mundo un lugar mejor para nosotros y las próximas generaciones.