Por: Alfredo Salgado-Gerente General del Grupo Eulen Perú
En los últimos años, los mercados han evolucionado hacia un entorno más competitivo, en el que las empresas han optado por delegar determinados procesos a un proveedor especializado para así poder centrarse en su actividad principal.
Actualmente, las empresas buscan contratar servicios integrados para reducir el impacto económico y la preocupación de tener a varias compañías dentro de sus operaciones. Cabe precisar que durante la pandemia se registró un aumento de 276% en el interés por solicitar la tercerización de la nómina de sueldos en el país, de acuerdo a datos de Adecco Perú.
Es aquí donde radica la importancia de la tercerización en la pyme. Externalizar le permitirá a este tipo de empresa enfocarse en aquellas acciones que más valor agregan. Este es el motivo por el que hoy en día los empresarios toman la decisión de desligarse de determinadas actividades que no les generan ingresos si no por el contrario gastos, al ser riesgoso ocuparse de temas que no son de su especialidad.
Sin ir muy lejos, las grandes empresas han dejado de operar en forma directa ciertas áreas de su negocio, para orientarse en sus actividades centrales, generando muchas oportunidades para pymes especializadas.
Por otra parte, también las pymes y nuevos emprendimientos evalúan cada vez más desde sus comienzos, el trabajo en red, subcontratando todas aquellas tareas que no forman parte de su núcleo diferencial.
Hoy en día cualquier mercado se transforma rápidamente gracias a los avances tecnológicos que experimentamos a diario. Tercerizar algunos de estos procesos, además de ahorrar tiempo y dinero en capacitación de personal, también permitirá ser ágil y rápido en la adopción de nuevas tecnologías al adquirir los servicios de una compañía experta en el tema.
El outsourcing puede llegar a significar a la pyme un impulso para conseguir sus objetivos y, lo más importante, le permitirá amoldar su compañía a las diferentes necesidades del mercado de forma rápida y efectiva.
Pensarlo de esta forma: una base de colaboradores dedicados únicamente en su actividad productiva y una reducción en los costos, le permitirá a su pyme actuar con rapidez ante incidencias, imprevistos o cambios repentinos en el sector, y ante una situación más positiva, habrá mejores recursos para innovar y desarrollar productos o servicios que le permitan trascender en la industria.