- Un buen líder es aquel que tiene la capacidad de influir en su equipo humano para co-crear un resultado evolutivo.
Un buen líder o CEO de una empresa requiere de grandes capacidades y habilidades tanto duras como blandas. Su responsabilidad es la de guiar a su equipo de trabajo por el camino correcto que cree valor para clientes, empleados, accionistas, comunidad y para toda la sociedad en su conjunto. Sin embargo, aún existen muchos mitos sobre cómo debe ser un buen líder.
Para José Antonio La Rosa, co-fundador de Supera World, consultora boutique especializada en transformaciones culturales de gran envergadura y quienes han capacitado a los líderes y cabezas de las empresas más importantes del Perú y de la región, un buen líder tiene una misión trascendental por realizar y requiere de mucha capacitación para convertirse en lo que las compañías y la sociedad necesita.
La Rosa explica que en nuestra sociedad existen diversos mitos sobre cómo debe actuar un líder, los cuales aclara en esta nota.
- Mito 1: El líder nace, no se hace. La verdad es que toda persona tiene dentro de sí un potencial muy elevado y que puede ser un líder en su hogar, en su comunidad, en su empresa y en su nación. Todo se puede lograr con compromiso y disciplina ilimitados.
- Mito 2: El líder debe ser muy carismático. La verdad es que, si bien el carisma ayuda, no basta para que una persona sea un buen líder. Se requiere integridad, amor al trabajo, ejemplaridad, inteligencia, resiliencia, perseverancia, entusiasmo, sagacidad, etc.
- Mito 3: El líder lo sabe todo. Según La Rosa, el conocimiento ha incrementado tanto que es imposible que un líder lo sepa todo. La realidad del sector lleva al líder de la empresa a ser un gran coordinador y armonizador del conocimiento de todo el equipo.
- Mito 4: El líder debe tener un trato áspero. La verdad es que depende del nivel de consciencia del equipo. Depende de la naturaleza de cada industria y marco competitivo. Los mejores líderes logran un balance entre lo que demanda el mercado, el logro de objetivos y la propia personalidad del líder. Hay líderes introvertidos y de trato humano que logran mucho más que un líder de trato áspero.
- El líder tiene el poder absoluto. Esta es una idea incorrecta, ya que, el poder y la autoridad tienen fecha de caducidad. Además, el liderazgo personal, que nace desde adentro, no requiere de autoridad para influir positivamente en la gente. Si un líder logra que su equipo lo admire y respete es más que nada porque cree en él. En ese momento su gestión se vuelve un liderazgo auténtico y genuino, puntualizó el consultor de Supera World.