La segunda mitad de agosto entró en vigencia el decreto supremo presentado por el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE), que prohíbe la tercerización laboral para actividades del núcleo del negocio o esenciales; lo que conlleva a multas superiores a los S/ 240 mil para aquellas empresas que incurran en esta norma.
Según la Asociación de Empresas de Tercerización y Trabajo Temporal (AETT), el 53% de las empresas que emplean contratos de terceros se encuentran en los sectores de minería y construcción; el 35% opera en los rubros de petróleo, retail y consumo; y, finalmente, un 12% está trabajando en actividades de agricultura, manufactura, comercio y otros.
Alfredo Salgado, Gerente General del Grupo EULEN Perú, a continuación, explica dos razones trascendentales para continuar con las actividades esenciales dentro de las compañías:
Empleo en el país
Se observa un alto riesgo para los trabajadores formales, que podrían perder sus empleos a consecuencia de no estar clara la norma, en cuanto a la definición del núcleo del negocio, la cual contiene criterios que hacen posible que cualquier actividad de una empresa encaje en él, haciendo que muy pocas o ninguna actividad pueda ser tercerizada.
Dicho decreto muestra inconvenientes para las compañías que requieren externalizar servicios, como para las micro y pequeñas empresas que los brindan, así como a los colaboradores que ahora laboran bajo esta modalidad.
Sin ir muy lejos, en México el empleo formal se redujo en un 80%, debido a que se ejecutó una reforma similar a la planteada en Perú, generando una gran deuda laboral regulatoria entre las pequeñas y medianas empresas.
Especialización en las empresas
Un punto a resaltar sobre la importancia de continuar con la externalización en actividades esenciales. Es que la empresa cuenta con personal que está apto para el puesto, tanto en las funciones que desempeñará como psicológicamente.
Al tercerizar servicios de seguridad, atención al cliente, recursos humanos, mantenimiento y limpieza, entre otros; la capacitación queda en manos de la empresa especializada en brindar servicios auxiliares, con experiencia en administrar el capital humano, lo que permite que la compañía no pierda el foco en sus objetivos principales y no descuide otros servicios esenciales.
Todas y cada una de las tareas asignadas se realizan con grado de especialidad, optimizando tiempo y evitando rotación de personal constante.