Ante un mercado expectante, la necesidad de ofrecer valor de negocio dinamizador es crítica. Por ende, más que productos y aplicaciones, los clientes requieren servicios que les permitan gestionar sus operaciones de forma responsable.
La incertidumbre y volatilidad hacen que las empresas escatimen en sus proyecciones e inversiones. Sin embargo, existen elementos que no cambian: los clientes siguen funcionando y operando de cara al consumidor final.
En ese sentido, las demandas de servicios, productos y aplicaciones digitales siguen al alza. Tecnologías como cloud, 5G, IoT, big data, inteligencia artificial, analítica, entre otras, serán relevantes para la región y su desarrollo.
“Desde hace años nos hemos ido consolidando como un integrador de tecnologías, pero con foco en servicios, entendiendo que la primera por sí sola no logra su objetivo sin una implementación personalizada y basada en objetivos de negocio”, explica Eduardo Briceño, gerente comercial de Logicalis para Perú y Bolivia.
Sin variar en la industria, la quinta generación de redes móviles y la sensorización se están convirtiendo en temas estratégicos relevantes para las compañías ya que la alta densidad de datos exigen una rápida circulación y baja latencia.
“Nuestro foco está en seguir siendo referentes en el mercado como integradores de sistemas. La implementación empieza con conectividad, hardware y software, pero aquello debe ir de la mano con un acompañamiento y asesoría que identifique las necesidades del cliente”, menciona Briceño.
La minería necesita automatización y autonomía; la banca y el retail requieren seguir modernizando sus plataformas y servicios para llegar a un cliente híbrido y con necesidades distintas cada día; y el gobierno, en particular, atender y solucionar lo que aqueja a sus ciudadanos.
Ciberseguridad y cloud: dos eslabones críticos
La información crece, se procesa, se administra y luego se emplea para alguna acción de negocio. Y la herramienta en la cual se ingesta es la nube. Pero esta no solo sirve como un sitio de resguardo, sino que también potencia su uso y le saca mayor provecho.
“Sacar el máximo potencial a las herramientas de la tecnología exige un tránsito, un camino. La adopción es alta, pero la efectividad aún no es la que quisiéramos. Por ende, es muy importante para cualquier país contar con profesionales dotados de experiencia y conocimientos para que la migración no solo trate de adopción, sino también de aplicación y buenos resultados”, detalla Briceño.
Sin embargo, toda adopción debe ser transversal e inherente a la ciberseguridad. “La región ya tiene la lupa de los ciberatacantes. Hay un problema muy grande de datos y seguridad. Por ende, apostamos por una gestión de la seguridad de la nube, aplicaciones, entornos híbridos, entre otros, con estrategias y metodologías eficientes y probadas”, precisa Luis Tarrillo, arquitecto de seguridad de Logicalis Perú.
La tecnología se ha consolidado como el puente entre el desarrollo y la continuidad operativa. Y en tiempos inciertos como los venideros, el reto seguirá siendo apostar por la innovación de forma inteligente, informada y digitalizada. Latinoamérica es una región muy grande y dado a que los cambios están ocurriendo rápidamente, el desafío es seguir potenciando sus oportunidades.
