Havas Group y la marca automotriz GAC Motor se han unido en una campaña de responsabilidad social empresarial. A través de una campaña gráfica se busca concientizar sobre los peligros de combinar la conducción y el consumo de alcohol, utilizando un doble sentido visual que compara la sensación de fiesta y diversión con las consecuencias trágicas de un accidente de tráfico.
Los datos de la Policía Nacional del Perú reflejan un total de 37,772 siniestros de tránsito en Lima Metropolitana en 2022, donde la imprudencia del conductor, el exceso de velocidad y la ebriedad del conductor fueron las principales causas. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo de alcohol aumenta el riesgo de verse involucrado en accidentes de tráfico, deteriorando las funciones esenciales para una conducción segura como la visión, los reflejos y la capacidad de discernimiento.
Los conductores con una concentración de alcohol en la sangre de entre 0,02 y 0,05 g/dl tienen un riesgo tres veces mayor de morir en un siniestro vial. Este riesgo aumenta a seis veces como mínimo con una tasa de alcoholemia entre 0,05 y 0,08 g/dl y se eleva exponencialmente cuando supera los 0,08 g/dl.
Salvador Vincenti, Director Creativo de Havas Group, destaca la simplicidad del recurso gráfico y el profundo mensaje que transmite la campaña, mientras que el gerente de GAC Motor, Paolo Nava, subraya la importancia de que el sector privado contribuya a la concientización en la seguridad vial.
“Es fundamental que todos los conductores tomen conciencia de estos riesgos y asuman su responsabilidad al volante. La iniciativa conjunta de Havas Group y GAC puede contribuir significativamente a sensibilizar a la población sobre estos peligros y fomentar una cultura de conducción responsable, trabajando juntos para reducir el número de accidentes de tránsito y proteger la vida de las personas en las carreteras”, comentó Vincenti.
La campaña de responsabilidad social empresarial de Havas Group y GAC Motor es una muestra de cómo las empresas pueden contribuir a la promoción de un cambio cultural en el ámbito de la seguridad en las carreteras. A través de la concientización sobre la importancia de no manejar bajo la influencia del alcohol, se espera reducir el número de accidentes de tránsito y salvar vidas.