En nuestro país, según reportes de la Asociación de Emprendedores del Perú (ASEP) en el 2022 existían alrededor de 7 millones de emprendimientos en la informalidad.
Perú es un país de emprendedores y gran parte de esas iniciativas económico-laborales, cuando deciden formalizarse; enfrentan diversos retos normativos. Estos retos normativos, sumados a la informalidad y a la falta de capacitación de los emprendedores, terminan generando un freno, a veces insalvable; para que estos proyectos empresariales crezcan o puedan sostenerse a lo largo del tiempo.
Teniendo en cuenta la realidad aquí descrita, Renán Herrera, Fundador & CEO del Estudio Herrera & Jara abogados; nos detalla cuales son los principales retos que tienen nuestros emprendedores peruanos a la hora de formalizar sus proyectos empresariales sobre todo, en el plano normativo:
- Sistema de protección al consumidor. Se refiere a la implementación del libro de reclamaciones, el cual debe estar acreditado y legalizado como corresponde, además de consultado y comunicado a El Indecopi. Cualquier negocio que tenga trato con el público, debe tener bien establecido este sistema, tanto si brinda servicios como productos.
- Procesos contables: En el plano de la relación entre empresas; se debe tener cuidado con la adecuada emisión de comprobantes de pago y con la trazabilidad de las transacciones, ya que para este 2023; los montos por encima de 2000 soles o de 500 dólares deben realizarse a través de operaciones bancarias. Además; se presentan muchas infracciones cometidas ante la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración Tributaria (SUNAT), ya sea por la falta de declaraciones a tiempo ante esta entidad o por el incumplimiento en el pago oportuno de impuestos o de algún fraccionamiento, lo que deriva en cobranzas coactivas o en la imposición de multas para muchos negocios.
- Sanciones municipales: Los negocios que tienen puerta a la calle, suelen cometer incumplimientos en cuanto a la licencia de funcionamiento o el certificado de Defensa Civil, que hoy se conoce como ITSE; la falta de los protocolos de seguridad en cuanto a la señalética y todo aquello que resulta materia fiscalizable por las municipalidades, termina por lo general, desencadenando en la imposición de sanciones para el negocio.
- Relaciones laborales: Es muy común en este ámbito; la falta de formalización de los contratos de trabajo, el no cumplir con los pagos que corresponden en los plazos idóneos, como por ejemplo, el pago a tiempo de la gratificación o de la CTS. Además, en el caso de la desvinculación de un trabajador, se suele fallar incumpliendo el plazo de 48 horas para entregar toda la documentación y proceder con el pago de la liquidación de beneficios sociales del trabajador. Es muy usual también; el no contar con un adecuado control de asistencia electrónico o con un manual que verifique el cumplimiento del horario de trabajo, que se obvie el pago de horas extras o que no se respeten los términos del contrato de trabajo.
Según el Fundador & CEO del Estudio Herrera & Jara abogados, de todos los ámbitos legales; el que exige mayores competencias hoy en día es el ámbito laboral. Hay varios subsistemas que las empresas no estan considerando como por ejemplo, la implementación de un sistema para prevenir el acoso laboral, la falta de un proceso para equiparar las brechas salariales entre varón y mujer, la carencia de un sistema de seguridad ocupacional o la adecuada difusión de las normas laborales o del reglamento interno de trabajo. En general, todos estos casos; pueden derivar en sanciones impuestas por parte de la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (SUNAFIL), sanciones que varían según el número de trabajadores o el nivel de gravedad de la infracción o afectación, y que pueden ir desde un porcentaje de la UIT hasta 10 UIT´s, para micro y pequeñas empresas, por ejemplo.
Para más información sobre el tema o prevenir estas trabas legales a la hora de emprender, puede ingresar a https://www.estudioherrerajara.com/servicios.html