Tendencias en la industria de alimentos y bebidas: El reto de avanzar hacia la sostenibilidad en las operaciones

La reducción de emisiones GEI, la implementación de materiales renovables y la innovación en procesos de producción son claves para fomentar la sostenibilidad en el sector privado

Los desafíos de sostenibilidad a los que se enfrentan las empresas actualmente están interconectados y juntos dejan huella en los recursos del planeta, los alimentos y el clima. Para lograr un cambio sostenible real es necesario comprender a fondo la complejidad e interconexión de dichas competencias y ejecutar medidas integrales en pro de su desarrollo.

Los fenómenos meteorológicos extremos, los conflictos socioambientales y las crisis económicas están causando problemas de producción, complicaciones en la cadena de suministro y otras perturbaciones que hacen vulnerables las operaciones de las compañías a nivel mundial. Por tal motivo, las sociedades están avanzando hacia prácticas de producción y consumo bajo modelos más sostenibles. Cada vez más industrias y empresas coinciden en la necesidad de construir una economía circular que proteja la salud y el ambiente.

En este contexto, Tetra Pak, líder mundial en soluciones de procesamiento y envasado de alimentos y bebidas, ha marcado la pauta en el sector privado, explorando oportunidades para reducir el impacto de sus operaciones en el ecosistema, teniendo al enfoque de sostenibilidad como eje central de toda su cadena de valor.

La estrategia de sostenibilidad de la transnacional tiene en cuenta las expectativas de sus grupos de interés, y los temas medioambientales, sociales y de gestión (ESG) más importantes para la industria del envasado de alimentos. Por consiguiente, se ha enfocado en aumentar el uso de fuentes renovables, llegando al 80% durante 2021. Este cambio ha impulsado la reducción en la emisión de gases de efecto invernadero y la empresa se ha propuesto lograr cero emisiones netas de GEI en sus operaciones para 2030.

Además, desde 2011, la compañía sueca ha instalado aproximadamente 5.5 MW de energía solar fotovoltaica a nivel global en sus fábricas de material de envase, proporcionando electricidad con bajas emisiones de carbono y reduciendo costos operativos. De igual forma, ha establecido el objetivo de obtener corriente 100% renovable para 2030, a través de un compromiso público con RE100. Mediante el suministro y la generación de electricidad renovable, la marca tiene la oportunidad de ayudar a impulsar la transición a una economía circular baja en carbono en muchos de los países geográficamente diversos en los que opera.

Siendo así, la empresa ha considerado las interconexiones e interdependencias de cinco áreas centrales donde puede hacer una contribución significativa: sistemas alimentarios, naturaleza, clima, circularidad, y sostenibilidad social. “Queremos que nuestras operaciones sean un punto de referencia mundial, por ende, nuestro enfoque de sostenibilidad abarca toda la cadena de valor. Reconocemos que solo podemos crear un futuro más sostenible si abordamos la naturaleza interconectada de los desafíos medioambientales, sociales y económicos que enfrentamos”, señaló Adolfo Orive, Presidente y CEO de Tetra Pak.

¿Cómo garantizar la seguridad alimentaria y reducir el impacto climático?

Los sistemas alimentarios son responsables de más de un tercio de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero (GEI) y son fundamentales para hacer frente a la crisis climática. Con una población en constante crecimiento, la demanda de alimentos aumenta rápidamente. Sin embargo, el incremento de la producción de alimentos conlleva el riesgo de ejercer más presión sobre recursos limitados como la tierra y el agua, lo que a su vez repercute en la naturaleza y agrava aún más el calentamiento global.

El uso del agua en instalaciones y operaciones debe ser considerado para un desarrollo sustentable y en línea con los desafíos actuales. Por ende, dentro de los servicios especializados que ofrece Tetra Pak se analiza desde la eficiencia hídrica y el tratamiento de aguas residuales hasta la eficiencia de la energía, el rendimiento del producto, los desechos y las emisiones de carbono. La empresa ha implementado nuevas tecnologías que lograron reducir el consumo de agua de manera significativa; una de ellas es un sistema de recirculación que ayuda a reducir hasta el 95% el líquido utilizado. Este sistema recupera gran parte del agua que consumen las máquinas, tratándola y reincorporándola.

Para la marca también es fundamental acelerar la descarbonización de los alimentos, innovar en la elaboración de sus envases y generar colaboraciones para liderar la transformación de la industria alimentaria, la cual debe abordar con urgencia desafíos complejos como el calentamiento global, la circularidad y la biodiversidad.

Por tal motivo, la compañía trabaja con sus proveedores para identificar oportunidades de reducción de las emisiones de carbono en sus operaciones y a lo largo de sus propias cadenas de suministro. Las diferentes materias primas tienen distintas huellas ambientales, por lo que aumentar la proporción de cartón y sustituir los plásticos de origen fósil por plásticos de origen vegetal en sus envases es una forma importante de reducir el impacto climático.

“Desde el lanzamiento de nuestro envase con polímeros de origen vegetal, hemos aumentado constantemente el uso de plásticos de origen vegetal frente a los plásticos de origen fósil, lo que contribuye a una huella de carbono aún más baja de nuestros envases”, indicó Mónica Montes, gerente de Sostenibilidad de Tetra Pak Perú y Colombia.

Asimismo, la ejecutiva sostuvo que la ambición de la compañía es ofrecer el envase de alimentos más sostenible del mundo. “Buscamos crear envases que estén completamente hechos de materiales renovables, que sean completamente reciclables y neutrales en carbono. En una economía circular, los materiales renovables son cruciales porque reducen la demanda de recursos limitados y el impacto ambiental de la extracción de recursos”.

Ciertamente, el modelo de trabajo de la empresa sueca le ha permitido adoptar un enfoque integral con acciones concretas para avanzar en sostenibilidad, comprendiendo la complejidad y la interconexión de los desafíos actuales en esta materia. Esta visión, hoy, es imitada por diversas empresas del rubro de envases y alimentos, sirviendo así de referencia a nivel mundial.