En la actualidad, la gestión inmobiliaria comercial se ha transformado en un proceso complejo, donde múltiples factores influyen en el éxito de un edificio o complejo de oficinas. La toma de decisiones informadas se ha vuelto fundamental, y para ello, es necesario considerar ciertos indicadores clave de rendimiento (KPI). En este sentido, JLL multinacional inmobiliaria comparte tres métricas se han convertido en auténticos disruptores de los KPI tradicionales en el sector de bienes raíces comerciales: los ingresos netos de explotación (NOI), el crecimiento de los alquileres y los gastos de capital (CapEx).
Satisfacción del inquilino: Un impulso para el éxito
En primer lugar, es esencial destacar cómo la satisfacción del inquilino puede tener un impacto directo en el aumento de los ingresos netos de explotación (NOI). Contar con datos en tiempo real sobre las preferencias y el comportamiento de los inquilinos se ha vuelto crucial para tomar decisiones informadas. Utilizar esta información de manera adecuada puede conducir a decisiones que mejoren la satisfacción de los inquilinos y, en consecuencia, aumenten el NOI.
“La satisfacción del inquilino influye en varios aspectos que impactan en el NOI. Los inquilinos satisfechos tienden a renovar sus contratos, lo que garantiza una entrada estable y predecible de ingresos. Además, reducen la tasa de vacantes, disminuyendo los costos asociados a la búsqueda de nuevos inquilinos.”, señaló JLL.
Asimismo, los inquilinos satisfechos pueden convertirse en embajadores del edificio, reduciendo los gastos de marketing y respaldando precios de alquiler más altos. Su cuidado de las propiedades también reduce los costos de mantenimiento y reparación. Por último, están dispuestos a aceptar aumentos razonables en el alquiler si consideran que los servicios y el mantenimiento justifican dicho incremento.
Eficiencia energética y alquileres más altos
Otro aspecto relevante en la gestión inmobiliaria moderna es el consumo de energía y su impacto en el crecimiento de los alquileres. Controlar y optimizar el consumo energético de un edificio puede reducir los gastos operativos (OpEx) y aumentar los alquileres. Los inversores han tomado conciencia de que las estrategias ecológicas pueden atraer una mayor ocupación y aumentar el valor de la propiedad. “Los edificios energéticamente eficientes son más atractivos para los inquilinos, tanto por su preocupación por el medio ambiente como por la oportunidad de reducir los costos de servicios públicos. Esto permite ofrecer alquileres más altos y aumentar el valor total de la propiedad.”, dijo JLL.
Mantenimiento preventivo: Ahorro en gastos de capital
Por último, el mantenimiento preventivo desempeña un papel vital en la gestión inmobiliaria moderna y tiene un impacto directo en los gastos de capital (CapEx). Un programa de mantenimiento preventivo bien implementado permite detectar ineficiencias en el edificio antes de que se conviertan en problemas graves. Esto prolonga la vida útil de los sistemas del edificio y reduce los costos de capital asociados a la actualización o sustitución de dichos sistemas. Además, un mantenimiento regular evita reparaciones y reemplazos inesperados, lo que implica un ahorro significativo en los gastos de CapEx.
El rol del Facility Management
Estas tres métricas -satisfacción del inquilino, eficiencia energética y mantenimiento preventivo- son fundamentales para la gestión inmobiliaria moderna. Su seguimiento y correcta implementación pueden tener un impacto positivo en el desempeño de los edificios y posicionarlos en un nivel superior en el mercado. Es crucial contar con equipos especializados en gestión y administración de instalaciones, conocidos como Facility Management, altamente capacitados para lograr el cumplimiento de estos parámetros. El equipo de Facility Management de JLL cuenta con especialistas en todas las áreas para ayudar a las empresas, industrias y todo tipo de instalaciones a lograr estos objetivos y prosperar en la gestión inmobiliaria moderna.
En resumen, la gestión inmobiliaria comercial ha evolucionado hacia un enfoque más centrado en la satisfacción del inquilino, la eficiencia energética y el mantenimiento preventivo. Estas métricas clave están redefiniendo el sector y ofrecen oportunidades significativas para propietarios e inversores que buscan un mayor éxito en el mercado.