- El documento buscará que las entidades del sector público identifiquen eventuales consorcios que enmascaren carteles entre competidores.
- Además, también servirá al sector privado para contar con buenas prácticas cuando se postule a contrataciones públicas a través de consorcios a licitaciones.
- La participación de consorcios en contrataciones públicas fue de 45% en promedio desde 2010 a 2021.
Tras un periodo de recepción de comentarios desde fines de 2022, el Indecopi tiene previsto aprobar en 2024 su Proyecto de Guía para Identificar Consorcios Inusuales en las Contrataciones Públicas Bajo la Ley de Represión de Conductas Anticompetitivas. Se trata de un conjunto de orientaciones de gran utilidad para el sector público y privado sobre características y modalidades de prácticas anticompetitivas al contratar con el Estado.
El documento, publicado por la Dirección Nacional de Investigación y Promoción de la Libre Competencia del Indecopi, buscará aclarar lineamientos, reconocer carteles y buenas prácticas para consorciarse.
Analizan el efecto de la guía para los negocios
Para el socio del departamento de Competencia, Regulación Económica y Propiedad Intelectual de Garrigues en el Perú, Ivo Gagliuffi, el documento será de especial importancia para las empresas. “Servirá a este sector para tener claro cuándo y cómo puede consorciarse. Muchos privados se han consorciado analizando casi intuitivamente si sus prácticas son sospechosas o no, corriendo el riesgo de ser confundidos con un cartel”, explica el abogado, cuyo equipo en Garrigues identificó tres partes fundamentales en las que se divide la guía de consorcios inusuales.
La primera parte del Proyecto de Guía trata de un análisis del rol de los consorcios en las contrataciones públicas y los límites impuestos por las normas pertinentes. Un segundo segmento se enfoca en el reconocimiento de indicios sobre consorcios ‘fachada’ para la ejecución de prácticas anticompetitivas; mientras que la tercera parte aborda buenas prácticas para aquellas empresas que deseen participar de una convocatoria pública en consorcio y buscan reducir la contingencia de infringir las normas de libre competencia.
Precisamente la última parte es la que más destaca Gagliuffi, debido a que empresas consorciadas podrían arriesgarse a ser sospechosas de haber conformado un cartel, es decir, que se habrían coludido para no competir limpiamente en licitaciones con el Estado. “La guía pretende que los consorcios se usen únicamente cuando sean deseables, es decir que las empresas que se consorcian se complementen entre sí y generen eficiencias para ellas mismas y el Estado, al ofrecerles mejores precios y un mejor producto”.
Consorcios en contrataciones con el Estado peruano
En el Perú, los consorcios tienen una presencia preponderante en las contrataciones públicas. Según datos publicados en el mencionado proyecto de guía del Indecopi, en el periodo de 2010 a 2021, la participación de consorcios como adjudicatarios fue de 45% (en promedio), alcanzando su máximo punto en el 2018, cuando llegó al 54.7%.
Dentro del tipo de contrataciones, en el procedimiento de selección para la ejecución de obras del Estado, Indecopi indica que los consorcios mantienen su importancia. En promedio, 75% de montos adjudicados han sido destinados a consorcios entre 2010 y 2021.