Llevar una empresa a la vanguardia de su industria requiere no sólo un pensamiento innovador, sino también la capacidad de extraer conocimientos de los sectores más inesperados. Esto es particularmente cierto en el ámbito de la ciberseguridad, donde la agilidad, la precisión y las estrategias avanzadas determinan quiénes son los ganadores del resto. Al establecer paralelismos con el mundo de alta velocidad de las carreras de Fórmula 1 (F1), los especialistas de Bitdefender en este artículo revela cinco lecciones cruciales de ciberseguridad que los líderes pueden aplicar para navegar en el panorama digital con la misma delicadeza con la que se navega en las pistas de carreras más desafiantes. Descubra cómo las tácticas cargadas de adrenalina de la F1 pueden potenciar su enfoque de ciberseguridad, impulsando a su organización a nuevas alturas de éxito y seguridad.
- La velocidad y la visibilidad dictan el éxito
En la pista de carreras y en el mundo de la ciberseguridad, la velocidad es posiblemente una de las cualidades más importantes a considerar. Sin embargo, una carrera no se gana simplemente por lo rápido que sea un coche, sino por lo rápido que puedas adaptarte. En cualquier carrera, la pista, el auto e incluso las condiciones climáticas pueden cambiar la forma en que se deben manejar las cosas. Cuanto más rápido pueda adaptarse un piloto a estos cambios, mejor equipado estará durante toda la carrera, lo que les dará ventaja frente a sus competidores.
En promedio, se sabe que los autos de F1 aceleran de 0 a 60 mph en menos de 3 segundos y pueden alcanzar velocidades máximas de más de 220 mph. Como resultado, el tiempo máximo de reacción de los mejores pilotos de F1 es de 0,2 segundos. Esta velocidad de reacción no es sólo para la conducción, sino para la infinidad de detalles que pueden cambiar durante una carrera. Debido a que hay tantas variables, la visibilidad es extremadamente importante, razón por la cual un auto de F1 está equipado con más de 500 sensores IoT.
Las organizaciones también deben priorizar la máxima visibilidad de su entorno junto con respuestas rápidas. A medida que cambian los panoramas de amenazas y las superficies de ataque, la rapidez con la que un departamento pueda reaccionar ante un compromiso de seguridad determinará el daño que un actor de amenazas puede causar. La necesidad de velocidad y visibilidad debe ser una consideración importante cuando un líder en ciberseguridad desarrolla su estrategia, busca comprar nuevas herramientas y tecnología y contrata nuevos socios de ciberseguridad.
- Las capacidades de respuesta marcan la diferencia
Las carreras de F1 varían entre 44 y 78 vueltas en una sola carrera, lo que significa que hay mucho margen para errores, problemas y accidentes que requieren respuesta y atención inmediatas. Incluso los cambios más pequeños y sutiles en una pista o en la condición de un automóvil requieren una adaptación rápida para maximizar las posibilidades de éxito del conductor.
De la misma manera, el tiempo de reacción de una organización ante una amenaza conocida, un incidente de seguridad o incluso una vulnerabilidad descubierta puede marcar la diferencia entre un compromiso devastador o un problema contenido. Una organización con una solución de detección y respuesta extendida (XDR) y capacidades de respuesta mejoradas puede acortar los tiempos de recuperación.
Los líderes de ciberseguridad deben priorizar una estrategia de ciberseguridad que cree un departamento diseñado para reaccionar. Piense en la rapidez con la que su departamento puede actuar:
- Se descubre una vulnerabilidad de día cero que afecta a sus sistemas.
- Su infraestructura cambia significativamente (piense en otra base de datos en la nube o en la apertura de una oficina completamente nueva).
- Su organización cambia un importante proveedor externo que tiene acceso a activos confidenciales de la empresa.
- Se descubren nuevos CVE que impactan a tu empresa.
Su capacidad para actuar rápidamente debe integrarse en las capacidades de su departamento de ciberseguridad. Cuanto más rápido pueda reaccionar, menos riesgo estará expuesta su organización.
- La innovación requiere un pensamiento innovador
Las carreras de F1 dependen en gran medida de la innovación tecnológica. Las empresas invierten en I+D para obtener una ventaja competitiva, buscando mejorar el rendimiento y la resistencia de un automóvil o, como comentamos anteriormente, encontrar formas nuevas y más eficientes de realizar un seguimiento de métricas clave.
Algunos de los principales avances que hemos visto incluyen sistemas informáticos avanzados capaces de analizar millones de puntos de datos en tiempo real durante una carrera, así como avances de ingeniería que mejoran el rendimiento y la eficiencia del combustible, tecnología que se ha transmitido a los vehículos de consumo. De la misma manera, los departamentos de ciberseguridad deben pensar de manera innovadora cuando se trata de innovación. Los avances tecnológicos continúan mejorando las defensas contra nuevas amenazas, pero la industria de la ciberseguridad ha madurado más allá de la simple protección.
Los departamentos de ciberseguridad que buscan madurar deben dejar de lado las soluciones que se centran únicamente en la prevención y, en cambio, aprovechar las nuevas innovaciones tecnológicas que también incluyen análisis impulsados por IA, software avanzado de detección e identificación y plataformas diseñadas para brindar visibilidad total en entornos complejos, especialmente los basados en la nube. Sin embargo, los departamentos también deberían pensar de forma innovadora cuando se trata de sus soluciones y buscar proveedores que ofrezcan:
- Facilidad operativa y eficiencia: las soluciones demasiado complejas o ruidosas conducen a departamentos abrumados.
- Tiempo más rápido para alcanzar la seguridad: La velocidad es el nombre del juego cuando se trata de capacidades de defensa y respuesta.
- Ofertas de seguridad con todos los servicios: para los departamentos con recursos y personal limitados (que son numerosos), los proveedores de seguridad administrada son clave.
- El éxito depende de la colaboración y el trabajo en equipo eficaces
Los equipos de F1 están formados por una gran cantidad de personas, todas con el único objetivo de garantizar que el conductor y el coche puedan rendir al máximo de sus capacidades. Esto se hace a través de la colaboración, la comunicación y la velocidad, todas cualidades que cualquier equipo de ciberseguridad puede apreciar.
Sin embargo, para lograr un rendimiento óptimo, esta cultura de trabajo en equipo y colaboración debe extenderse más allá del departamento de ciberseguridad de una organización. Así como existen múltiples roles y responsabilidades dedicadas a un solo automóvil y corredor, existen múltiples partes interesadas y departamentos afectados por cualquier incidente de seguridad, compromiso o violación de datos. Estos podrían ser los departamentos:
- Legal, que tiene un equipo que aborda cuestiones regulatorias y de cumplimiento.
- Relaciones públicas y comunicaciones, que ayudar a comunicar problemas al público y al resto de la empresa.
- Ejecutivos y líderes de departamento: quienes brindan orientación de arriba hacia abajo a los departamentos afectados.
- Finanzas: Dependiendo de la gravedad del problema y de lo que esté en juego, las organizaciones financieras probablemente desempeñarán un papel importante.
La colaboración cercana y rápida entre departamentos, TI y ciberseguridad es crucial para una defensa efectiva. Un líder en ciberseguridad debe fomentar una cultura de seguridad organizacional, asegurándose de que todos conozcan sus roles ante incidentes de seguridad. La comunicación y colaboración proactivas son clave para una respuesta eficiente y una recuperación menos problemática.
- La confianza es necesaria para que un equipo funcione bien
Dada la velocidad a la que se mueven todas las partes involucradas en un equipo en las carreras de F1, la confianza es increíblemente importante. Los pilotos deben confiar en su equipo, ya que cualquier duda o duda puede provocar la pérdida de preciosos segundos, lo que marca la diferencia entre una carrera ganada o perdida.
De la misma manera, los líderes de ciberseguridad deben confiar en sus soluciones, procesos, controles, tecnología y equipo. Sin embargo, tanto para los equipos de ciberseguridad como para los de F1, esta confianza no debería ser ciega.
Los líderes deben probar estas medidas para asegurarse de que estén funcionando según lo previsto, realizar evaluaciones anuales y planificación de escenarios continua y pruebas de penetración para ver si hay alguna brecha en el desempeño o si algún equipo no tiene los recursos necesarios para desempeñarse de manera óptima.
Al verificar y probar la capacidad de su organización para responder y desempeñarse frente a un ataque potencial, puede confiar en que actuarán como deberían cuando ocurra un escenario de compromiso real, brindándole el tiempo y el espacio para tomar decisiones importantes de manera rápida y reaccionar ante cualquier circunstancia imprevista.
En los vertiginosos ámbitos de la Fórmula 1 y la ciberseguridad, el éxito depende de la velocidad, la agilidad y el poder de la innovación. Así como los equipos de F1 afinan sus estrategias y máquinas para lograr el máximo rendimiento, los líderes en ciberseguridad también deben adaptarse, innovar y colaborar para salvaguardar sus paisajes digitales.
Al adoptar las lecciones aprendidas en la pista (velocidad y visibilidad, respuesta rápida, pensamiento innovador, trabajo en equipo eficaz y confianza), podemos guiar a nuestras organizaciones hacia una mayor seguridad y éxito. El vertiginoso mundo de la F1 puede inspirar enfoques de ciberseguridad, impulsando a los equipos de seguridad de la información a la victoria en la carrera digital contra las amenazas.