Por: Álvaro Mellado, director de Operaciones y Seguridad Vial de Autopista del Norte, unidad de negocio de Aleatica en Perú.
Entre el 2021 y 2023, el Observatorio Nacional de Seguridad Vial (ONSV), entidad adscrita al Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), documentó una media anual de 3.000 fallecimientos en las vías del país. Bajo este contexto, es imperativo replantear el enfoque, por ello, las vías perdonadoras se presentan como una alternativa clave para reducir la siniestrabilidad vial y proteger a los usuarios.
¿Qué son las vías perdonadoras? Son carreteras diseñadas para minimizar daños y peligros en caso de accidentes. No se limitan a castigar infracciones, sino a prevenir tragedias. Estamos hablando entonces de un enfoque audaz que no busca eliminar por completo los accidentes, pues somos seres humanos propensos al error, sino diseñar infraestructuras que minimicen las consecuencias fatales de esos errores.
Pensemos en un despiste de un vehículo en una carretera. Una vía perdonadora contaría con sistemas de contención, minimizando así los impactos de ese accidente. En una vía perdonadora hay señalización clara y visible que guía a los conductores, incluso en condiciones adversas.
La implementación de diversos dispositivos de seguridad vial, también son fundamentales para una conducción segura. Por ejemplo, las bandas transversales que alertan a los conductores sobre cambios en la carretera, o barreras de seguridad que protegen en caso de colisiones, así como sensores de velocidad que regulan el flujo del tráfico, y señaléticas claras que orientan y advierten a los conductores. Todos estos componentes trabajan en conjunto para crear un entorno vial más seguro, reduciendo la probabilidad de accidentes y protegiendo la vida de los usuarios. En la red vial 4 (tramo Pativilca – Santa – Salaverry) se han implementado este tipo de soluciones de seguridad vial, y con mucha satisfacción se observan resultados tangibles, como la reducción de casi el 50% de accidentes en los sectores en los que se realizaron estas mejoras.
Los accidentes de tránsito no solo causan pérdidas de vidas y lesiones, sino también enormes costos económicos y sociales. Cada víctima es un individuo con todo un ecosistema social a su alrededor, el cual se ve involucrado cuando ocurren tragedias. Por esto, la seguridad vial es de suma importancia para las empresas concesionarias de carreteras, desde donde colocamos nuestros esfuerzos en ofrecer una infraestructura de primera calidad, señalización precisa y un mantenimiento continuo en nuestras carreteras.
En un país que ha lamentado varias víctimas producto de los accidentes en carreteras, las vías perdonadoras no son una utopía, son una necesidad imperante, un llamado urgente a repensar la infraestructura vial desde la óptica de la seguridad, donde la prioridad absoluta sea proteger la vida humana.