(Villa de Agüimes, Las Palmas, España, 1953) empresario hotelero de categoría en la actualidad, Eustasio López González siempre ha destacado por su espíritu emprendedor, por esas ganas de hacer las cosas de una manera distinta. La muerte de su padre, a los 14 años, le llevó a crear la empresa Hijos de Francisco López Sánchez (LOPESAN), centrada en el sector de la construcción, principalmente.
Especializado durante esta etapa en infraestructuras viarias y en la promoción de urbanizaciones, en 1974 se hacen con un primer aglomerado de asfalto con el que consiguen llevar una línea de carreteras hasta el aeropuerto de Gran Canaria haciendo así su acceso mucho más sencillo.
Apasionado del turismo desde sus inicios, Eustasio Lopez compra el complejo de Altamarena en Fuerteventura en 1991 y, cuatro años más tarde, nace la marca Lopesan Hotel Group con la que poco a poco se va haciendo con recintos tan importantes como el Buenaventura o el Catarina Playa. Hoy, todavía en activo, se puede decir que fue una de las mejores inversiones que ha hecho.
En 1999, después de varios éxitos, se hace con buena parte del grupo alemán IFA Hotels & Touristik. Aquí, su empresa se centra sobre todo en resorts vacacionales y estancias de lujo que tienen como primeros eslabones los nombres de Costa Meloneras, Corallium Spa y Casino. Con este último hablamos de un complejo de 1136 habitaciones, muchas de ellas para turistas de alta categoría.
Metido en proyectos significativos en los años siguientes, desde 2004 se dan adquisiciones tan importantes como el Lopesan Villa del Conde o el Lopesan Baobab que llega para 2009 con iguales perspectivas de negocio. Con todas estas cartas sobre la mesa, el empresario ya disponía de una categoría real en su zona de trabajo.
Actualmente el grupo Lopesan opera con veinte establecimientos en cuatro países diferentes y no se descarta la idea de una expansión nueva. Si bien las principales firmas turísticas siguen estando en Canarias, compensa la idea de saber que el éxito no se ha quedado sólo allí dónde comenzó.
Con actividades diversificadas, Eustasio Lopez también se ha metido al sector industrial gracias al grupo Cook & Events, una empresa de preparación y distribución de comidas preparadas que en nuestros días elabora más de 35.000 platos diarios. Esto, que lo convierte en un completo hombre de negocios, se une a lo que también viene consiguiendo por la inversión agrícola.
La finca Veneguera, con la que se hizo en 2014, es un lugar en el que se plantan plátanos, mangos, aguacates y cítricos. Apoyada por sus hijos en la actualidad, ha servido de motor de alimentos para muchos de sus otros negocios, para esos que están directamente relacionados con la comida y/o los alojamientos.
Al frente todavía de Lopesan, ha recibido varios premios y, como apuesta de futuro sólo busca que el negocio siga creciendo, que la expansión llegue a nuevos rincones en el mundo y que sus hijos, algún día, reciban por completo el legado de comercio que deja en sus manos.