ProInversión sólo lleva a cabo los encargos que le asigna el Estado peruano.
Empresarios de la zona bancaria de San Isidro, conocida por sus centros comerciales, inmobiliarias, aseguradoras y principales bancos del país, se han reunido con altos funcionarios de ProInversión para presentar una oferta por el edificio central de Petroperú, ubicado en la avenida Canaval y Moreyra. Fuentes del sector informan que se han llevado a cabo múltiples reuniones a lo largo del año, a solicitud de los propios empresarios de este centro financiero.
Actualmente, ProInversión, agencia vinculada al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), alquila el noveno piso del edificio de Petroperú y ha recibido la notificación para proceder con la desvinculación de este activo. ProInversión está considerando dos alternativas para atender las solicitudes de los empresarios de esta área, que está dominada por los cuatro principales bancos del país.
Las opciones incluyen la desagregación de este activo, considerado no crítico para los intereses de la petrolera estatal, a través de una Asociación Público-Privada (APP) o mediante Proyectos en Activo (PA). Sea cual sea la modalidad, será necesario que el Gobierno peruano publique un decreto de urgencia, anunciado en varias ocasiones por el premier Gustavo Adrianzén, antes de avanzar en este proceso. Mientras tanto, el MEF no puede proceder con ninguna acción.
También se deberá decidir si se adjudicará toda la infraestructura o si algunas plantas permanecerán bajo control de la petrolera, que recientemente solicitó el traslado de su personal a Talara como parte de un plan de ceses voluntarios y otras medidas laborales. La intención es integrar el edificio central de Petroperú en el circuito comercial de la zona financiera de San Isidro.
No está claro si las reuniones entre los empresarios de San Isidro y ProInversión se llevaron a cabo antes de que el directorio de Oliver Stark recomendara la quiebra de la estatal peruana a los ministerios de Energía y Minas y de Economía y Finanzas. En una entrevista con La República, Miguel Cordano, presidente del Cuerpo Técnico de Tasaciones del Perú (CTTP), estimó que el terreno donde se encuentra el edificio de 22 pisos está valorado en aproximadamente 43,5 millones de dólares, una cifra que no tendría un impacto significativo sobre la deuda total de Petroperú.
Es importante señalar que ProInversión sólo lleva a cabo los encargos que le asigna el Estado peruano. La decisión de vender o adjudicar el edificio central de Petroperú mediante APP o PA compete a su directorio y, en última instancia, a la Junta General de Accionistas (JGA) de la petrolera, que incluye al MEF y al Ministerio de Energía y Minas (Minem).
Aurelio Ochoa Alencastre, especialista en temas energéticos, enfatiza que, de confirmarse que el comprador fuera uno de los principales cuatro bancos del país (BCP, Interbank, BBVA o Scotiabank), la operación debería ser transparente, dado que algunos directores actuales de Petroperú provienen de ese sector. Por ejemplo, David Tuesta y Germán Boza han estado vinculados a esos bancos.
Ochoa subraya que la venta de estos activos prescindibles no resolverá por sí sola el problema financiero de la empresa, ya que la suma obtenida sería mínima en comparación con la deuda total. Recomienda asegurar que el proceso de transferencia del edificio sea completamente transparente para evitar situaciones en las que se puedan realizar maniobras indebidas durante el proceso de venta.