Gracias a sistemas tecnológicos se pueden imprimir etiquetas personalizadas al instante y aplicarlas en el embalaje durante el proceso automatizando su producción.
El sector de alimentos es una de las industrias que sin lugar a duda necesita de la tecnología para optimizar la producción, controlar la calidad de los productos, garantizar el cumplimiento de las normas sanitarias y mejorar la eficiencia de sus operaciones. Automatizar procesos relacionados con la cadena de suministro y el embalaje, hacen posible mantener los productos frescos, cumplir con las fechas de entrega y mantener su competitividad en el mercado.
Ulrich Reiser, country manager de STG en Perú, explica que el proceso de embalaje es uno de los más importantes en esta industria: “la automatización de esta tarea reduce los errores humanos, así como el tiempo de empaquetado, al eliminar los tiempos de inactividad. Asimismo, desde el lado de la seguridad alimentaria, garantiza que se mantengan los estándares de calidad al asegurarse que cada producto esté correctamente etiquetado”.
En esta industria, el envase y el embalaje de los productos debe realizarse de manera eficiente. Contar con tecnologías para estos procesos, ayudan no solo lograr óptimos resultados a nivel operativo, sino mejorar la productividad y rentabilidad de la empresa.
Existen soluciones tecnológicas que están diseñadas para cumplir con los estándares y regulaciones que exige la industria. “Al contar con la impresión y aplicación automática de etiquetas en tiempo real, se reducen los errores de etiquetado manual, logrando mayor velocidad y precisión. Estos equipos, además permiten automatizar la fase de identificación de los embalajes, logrando que en cada etiqueta aplicada se encuentre la información en tiempo real sobre producción: referencia, cantidad, consumo preferente, lote, código de barras, etc”, destaca el ejecutivo.
Impacto del embalaje automatizado en la productividad del sector.
La flexibilidad de los sistemas de embalaje automatizado, facilita los procesos de producción al adaptarse rápidamente a los tipos de productos y tamaños de embalaje. Esta tecnología es beneficiosa para sectores como el alimentario, considerando que cada producto debe ser empaquetado preservando la frescura, seguridad y calidad del producto en todo el proceso de la cadena logística.
Reiser señala que estos sistemas pueden integrarse a otros sistemas que les permite optimizar el seguimiento de los productos y tener acceso al inventario en tiempo real. De esta manera se facilita la trazabilidad del producto alimentario.
Desde las operaciones, al automatizar las tareas repetitivas y físicas del embalaje, hace posible que el personal pueda realizar actividades estratégicas que generan mayor valor a la empresa en sus respectivas áreas.
“La automatización del embalaje es una inversión estratégica que permite a las empresas del sector alimentario e industrial no solo aumentar su capacidad productiva, sino también optimizar recursos y reducir costos para atender la demanda del mercado”, finaliza el funcionario.