Gravar la riqueza, combatir las economías ilegales y renegociar la deuda internacional: una llave para reducir la desigualdad en América Latina

La justicia fiscal se ha convertido en un tema central en el debate sobre cómo impulsar el desarrollo en América Latina. La región, caracterizada por una alta desigualdad económica, podría ver mejoras significativas si se implementan políticas que aseguren una distribución más equitativa de los recursos. La implementación efectiva de estas políticas requerirá un compromiso conjunto de los gobiernos, el sector privado y la sociedad civil, revela Latindadd.

América Latina enfrenta desafíos impostergables en medio de su búsqueda de desarrollo económico y social. La región, considerada una de las más vulnerables del mundo, podría beneficiarse de estrategias de renegociación de deuda y reformas tributarias en favor de quienes menos tienen. Estas medidas son vistas como esenciales para promover la justicia fiscal y mejorar las condiciones de vida de sus habitantes.

Ad portas de cumplir 25 años de existencia, Latindadd – Red Latinoamericana por Justicia Económica y Social, inauguró ayer la conferencia «Justicia Económica, Social y Climática para América Latina en un mundo al borde de la Guerra», un evento que busca abordar los problemas y agendas pendientes que enfrenta la región en el contexto de las tensiones globales, como la creciente rivalidad entre China y EEUU.

Durante la ponencia, Carlos Bedoya, coordinador general de Latindadd en Perú, destacó la complejidad de la situación actual, marcada por la disputa económica entre Occidente y Oriente, y la influencia de potencias desde el hemisferio norte. Según Bedoya, las organizaciones afiliadas a Latindadd deben articular una agenda programática con autoridades y movimientos sociales para promover el bienestar de los pueblos.

El desafío es de largo aliento. Nathalie Beghin, co-presidenta de Latindadd en Brasil, enfatizó la importancia de reformar la fiscalidad en la región. Beghin señaló que, si se combaten los flujos financieros ilícitos, se renegocian las deudas y se gravan adecuadamente a las multinacionales, se podrían generar suficientes recursos públicos para atender las necesidades sociales. Latindadd, según Beghin, es una red que trabaja en estos campos y busca evitar la trampa de la falta de recursos para financiar el clima, el hambre o los derechos humanos.

Desde Bolivia, Patricia Miranda, coordinadora del área de Nueva Arquitectura Financiera de Latindadd, subrayó que la dependencia de América Latina de la producción de materias primas contribuye al endeudamiento. Miranda criticó la gobernanza económica global, dominada por instituciones financieras internacionales y grupos como el G7, que perpetúan una estructura que beneficia a unos pocos. Según Miranda, hay una sobrevaloración del sector privado en el desarrollo, lo que afecta al sector público y a la población.

Adrián Falco, coordinador del área de Justicia Fiscal de Latindadd, explicó que el éxito de estos objetivos se centra en tres ejes: formación, participación y reforma del sistema tributario. Falco destacó la importancia de capacitar a cuadros políticos para discutir con la sociedad civil y advirtió que, sin una reforma tributaria, los recursos no llegarán, lo que obligará a un endeudamiento constante.

Finalmente, Carola Mejía, coordinadora del área de Justicia Climática de Latindadd, habló sobre la deuda climática de los países que manejan el financiamiento climático pero que han contribuido a la crisis. Mejía denunció que estos países no asumen su responsabilidad y desvían fondos hacia subsidios a combustibles fósiles, industrias extractivas y guerras, en lugar de atender las crisis climáticas.

La conferencia busca ser un espacio de encuentro para organizaciones civiles que promueven una economía que cuide a las personas y combata la desigualdad. La red trabaja para encontrar nuevas formas de tributación y luchar contra las deudas ilegítimas, con el objetivo de construir sociedades más autónomas y justas.