El éxito de CRE residirá en su capacidad para orquestar 4 diferentes fuerzas.
JLL, firma líder en bienes raíces, ha presentado su informe “El Futuro del Trabajo en Latinoamérica”, un análisis detallado sobre las principales tendencias que marcarán el rumbo del entorno laboral en la región. A partir de una encuesta global realizada a más de 2.300 líderes empresariales y de Corporate Real Estate (CRE), el estudio destaca las prioridades estratégicas, los retos y las oportunidades del sector inmobiliario corporativo en países como Colombia, Argentina, Brasil, Chile, México y Perú.
El informe resalta que en Perú la evolución del mercado laboral estará marcada por la consolidación de modelos de trabajo híbridos, el crecimiento del coworking y una mayor inversión en tecnología y sostenibilidad en el sector inmobiliario corporativo. Además, la digitalización y la optimización del portafolio inmobiliario serán claves para el futuro del CRE en el país.
“El futuro del trabajo en Perú y la región estará definido por espacios de trabajo más flexibles, sostenibles y eficientes. Las empresas que adopten estos cambios estarán mejor preparadas para afrontar los desafíos del mercado y atraer talento,” afirma Cindy Garay, Directora de Consultoría de JLL.
Datos de Perú:
Perú lidera el trabajo presencial en América Latina
- Perú es el país con la mayor tasa de presencialidad en la región: el 72% de las empresas mantienen asistencia obligatoria de cinco días en la oficina**.
- Se espera que para 2030 la mayoría de las empresas en Perú adopten un modelo híbrido de 4 días presenciales para mejorar la eficiencia y el bienestar de los empleados.
Expectativas de crecimiento en bienes raíces corporativos
- En Perú, se proyecta un aumento de hasta el 20% en inversiones en infraestructura corporativa, con un enfoque en sostenibilidad y optimización del espacio.
- La tendencia hacia la descentralización de oficinas en Lima está cobrando relevancia, con más empresas buscando opciones fuera de los centros urbanos tradicionales.
Crecimiento de espacios flexibles y coworking en Perú
- Se prevé un crecimiento del 44% en la adopción de espacios de trabajo flexibles operados por terceros en Lima y otras ciudades clave.
- El sector inmobiliario corporativo está priorizando espacios híbridos que permitan mayor flexibilidad en la ocupación.
Impacto del trabajo híbrido en la planificación urbana
- Las empresas en Perú están explorando modelos de oficinas con acceso comunitario** para optimizar el uso del portafolio inmobiliario.
- El auge del teletrabajo y el coworking está llevando a una **reconfiguración del mercado inmobiliario en Lima**, impulsando desarrollos en zonas estratégicas para evitar la congestión urbana.
Para esta región, que incluyó datos de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Perú, estos fueron los principales hallazgos:
- Un giro hacia el crecimiento, la innovación y la sostenibilidad ambiental de una forma responsable
Tanto los líderes de negocio como los de CRE comparten la visión sobre las prioridades durante los próximos 5 años: lograr el crecimiento del negocio, apoyar la innovación y la sostenibilidad ambiental. Sin embargo, el área de CRE se enfrenta a una mayor presión, ya que se espera que aporte a estas prioridades logrando mejoras en la eficiencia y en la reducción de costos (gráfica 1). Así pues, esta área deberá encontrar el equilibrio entre las demandas aparentemente contradictorias de crecimiento y eficiencia, lo que le demandará un enfoque altamente estratégico, creativo y basado en datos, así como estrategias de tercerización.
- Consolidación del trabajo desde la oficina
En el mundo, América Latina lidera el trabajo presencial de 5 días en la oficina: los empleados de 6 de cada 10 empresas asisten todos los días a la oficina (gráfica 4), y, dentro de esta región Perú lidera el modelo de trabajo presencial (gráfica 5). Hacia el 2030 se espera la consolidación de esquemas de trabajo presencial de 4 días apoyado por la descentralización de las oficinas, así como la integración comunitaria con instalaciones abiertas a todo el público para hacer un uso más eficiente del portafolio inmobiliario, lo que puede implicar una menor demanda de espacios de trabajo tradicionales.
- Reposicionamiento de CRE como un área más estratégica y conectada con el negocio
Los mayores desafíos que enfrenta CRE son la percepción de parte del negocio de ser un centro de costo más que un generador de valor e integración insuficiente con otras unidades de negocio, lo cual puede repercutir en la falta de inversiones, entre ellas, en tecnología (gráfica 9). Para superar estas restricciones, CRE deberá hacer una gestión basada en datos que vaya más allá de monitorear los costos, identificar y aprovechar oportunidades para crear sinergias con otras unidades de negocio y que el equipo de CRE evolucione en sus habilidades, algo que los líderes de esta área ya han reconocido como una iniciativa fundamental para el futuro.
- Intención de mayor adopción de tecnología emergente con importantes retos en la implementación
Mientras que existe un optimismo significativo entre los líderes de negocio sobre el potencial de la IA para transformar las organizaciones, subsiste un grado de escepticismo entre los líderes de CRE. Esto puede atribuirse a preocupaciones sobre el costo de implementación, la ausencia de una estrategia integral para la adopción de IA y los riesgos relacionados con la seguridad y privacidad de los datos. Además, la calidad y confiabilidad de estos emerge como un factor crucial que influye en su percepción (gráfica 11). Esta visión conservadora sugiere que, en los próximos años, es probable que las operaciones de CRE se caractericen por una integración híbrida de trabajo manual y asistido por IA, en lugar de una automatización completa (gráfica 12)
A partir de los hallazgos del estudio, el éxito de CRE residirá en su capacidad para orquestar 4 diferentes fuerzas: ayudar al crecimiento de negocio de manera inteligente, redefinir el uso y la función del espacio de oficina, reposicionar CRE como socio estratégico de la organización, y superar los retos de adopción tecnológica.