Según un estudio realizado por Automation Anywhere, al cierre del 2023, el 34% de las empresas en Perú han implementado Inteligencia Artificial y automatización en sus tareas diarias, ubicándose en el sexto lugar en Latinoamérica que más ha adoptado dicha tecnología.
La revolución digital ha transformado las reglas del juego en el mundo empresarial. Hoy, liderar no sólo implica la experiencia o autoridad, sino la capacidad de innovar, adaptarse y aprovechar la tecnología para impulsar el crecimiento. En este contexto, la automatización y la industria 4.0 están redefiniendo la gestión de empresa, colocando la toma de decisiones basada en datos como el nuevo pilar del éxito.
Industria 4.0: el punto de inflexión en la gestión empresarial
De acuerdo con el Doctor Diego Apolo Buenaño, docente de Broward International University – BIU, perteneciente a Planeta Formación y Universidades, el futuro de la automatización en el ámbito empresarial está marcando por la convergencia de tecnologías como la Inteligencia Artificial (IA), robótica, aprendizaje profundo y la analítica de datos. “Es por ello por lo que, en la actualidad, la era digital ha redefinido las prácticas sociales, culturales y económicas, situando a las sociedades es un punto de inflexión”.
Para el académico de BIU, ya no basta con centrarse en los datos o en el conjunto de datos organizados, “hoy la clave radica en la Sabiduría, entendida como la capacidad de tomar decisiones a partir del análisis integral de datos”. Es así como en el entorno industrial, la eficiencia y eficacia se vuelven prioridades ineludibles en muchos aspectos, por lo cual las instituciones deben adoptar tecnología y metodología ágiles, propias de la industria 4.0, “desde la computación en la nube hasta la transformación digital, con un enfoque basado en la optimización de procesos, mejora continua e innovación”.
La automatización como ventaja competitiva
Para el experto, uno de los mayores desafíos que enfrentan los líderes y las empresas no es sólo la inversión en infraestructura, es la gestión del cambio. “Antes de enfocarse en costos o nuevas herramientas, es fundamental analizar los factores tangibles e intangibles que afectan la adopción y sostenibilidad de la automatización”, señala.
También indica que potenciar la alfabetización tecnológica, la toma de decisiones y la ética, la responsabilidad y la actitud se han convertido en elementos claves para los trabajos del futuro. “Además, el crear lugares de trabajo que prioricen el salario emocional, promuevan la cooperación multi, inter y transdisciplinar, generar un pensamiento innovador y fomenta un aporte significativo en todos los ámbitos de los colaboradores, sean personal, académico y profesional, atraerán mejores prospectos”.
Automatización, una herramienta esencial dentro de las empresas
Para que la automatización se convierta en un verdadero aliado dentro de un ecosistema dinámico, como lo son las empresas, Buenaño destaca que no basta con integrarla, hay que comprender su impacto en los procesos sociales y culturales que están adscritos a su implementación. “El uso intensivo de tecnología no garantiza por sí mismo la mejora de prácticas operacionales. En este sentido, muchos proyectos tecnológicos no fracasan por su diseño o implementación; sino por la falta de apropiación significativa desde todos los actores involucrados. Entonces, la clave del éxito surge en medida que estos comprendan su impacto y la importancia de su rol en estos procesos sistémicos, que más que equilibrar es crear una armonía adaptativa a los escenarios”.
Ante este escenario, considera que la habilidad de adaptación y cooperación es la piedra angular de cualquier institución. “En estos procesos donde se habla de industrias 4.0 y educación 4.0, los líderes deben entender que su rol debe ser el de mentores que no sólo promuevan prácticas de repetición o cumplimiento de funciones. Deben ser mentores que marquen, mediante retos y logros de objetivos a corto, mediano y largo plazo, buscar un sentido y propósito a todo el equipo. —El liderazgo es más allá que un letrero en la puesta o un texto en la web—“, sentencia Buenaño.