ADEX PIDE VISIÓN CLARA DEL ESTADO Y SENTIDO DE URGENCIA.

El presidente de la Asociación de Exportadores (ADEX), Julio Pérez Alván, pidió una visión clara del Estado, marcada por el sentido de urgencia y de lo que realmente necesitan los ciudadanos. “Los milagros económicos se producen cuando a la fe de los habitantes de una nación, se suman políticas públicas las cuales impulsan el desarrollo”, enfatizó durante la clausura del VI Congreso Internacional de Joyería y Orfebrería, en Cusco.

“En lugar de concentrarnos en desarrollar nuevas habilidades de los artesanos e industriales y hacer crecer a las pequeñas y medianas empresas, de tal forma que se adapten a las nuevas tendencias mundiales, estamos rogamos al Gobierno a fin de que termine de elaborar el proyecto de ley y permita a los productores de joyería y orfebrería adquirir oro a nivel local, sin problemas y de manera transparente”, dijo.

Para un país que es uno de los principales productores de oro en bruto, es irónico y contradictorio, además de revelar una falta de proyección del gobierno, que ese dispositivo aún no sea emitido –añadió–, es deber del Estado resolver esta situación de inmediato y apoyar la generación de valor agregado a nuestra materia prima, de esa forma se desarrollará el Perú.

Luego de expresar que el 2023 será muy especial, pues ADEX cumplirá 50 años de vida institucional, Pérez resaltó la permanencia de las instituciones ejemplares en el tiempo, pues le dan la solidez necesaria al desarrollo de la nación.

Joyería

En su discurso de clausura del VI Congreso Internacional de Joyería y Orfebrería, el líder gremial puntualizó que la comercialización mundial de la joyería asciende a cerca de US$ 300 mil millones y su mercado líder es EE.UU. con importaciones por US$ 15 mil 100 millones al año; sin embargo, pese a ese potencial, Perú exportó en los últimos 5 años alrededor de US$120 millones, representando el 0.04% y 0.80% respectivamente.

Esos porcentajes son risibles si se considera que nuestro país cuenta con grandes ventajas comparativas y competitivas –aseveró–, a excepción del desabastecimiento local de oro, lo cual responde exclusivamente a la falta de voluntad política.

Recordó que, en la historia de la civilización, la joyería y orfebrería ocuparon un lugar muy importante. En Francia, en el siglo XIII (año 1,268), en el libro de los oficios figuraban registrados y divididos en 7 grupos los oficios considerados más importantes: alimentos, joyería, metales, textiles y pañeros, pieles y construcción.

En opinión de Julio Pérez, era tan valiosa la función del joyero y orfebre en ese tiempo, tanto económica como políticamente, que era quien certificaba la autenticidad de la riqueza de un noble o del gobierno de una ciudad.

“Los dejo con una frase final del teólogo Reinhold Niebuhr: Es propio de la naturaleza humana creer que tenemos el deber de intentar todo aquello que parezca posible, y créanme que desde la presidencia de ADEX, desde la plana ejecutiva y de la de todos sus comités seguiremos en ese camino, intentando mejorar la vida de todos los exportadores, sus colaboradores, sus familias y todos los peruanos”, concluyó.

La ceremonia contó con la presencia del Rector de la Universidad San Antonio Abad del Cusco, Eleazar Crucinta Ugarte; el alcalde de la Municipalidad Provincial del Cusco, Víctor Germán Boluarte Medina; la presidenta del Comité de Joyería y Orfebrería de ADEX, Rocío Mantilla Goyzueta; el gerente general del gremio, Jorge Robinet y la gerenta Central de Exportaciones (ADEX), Ysabel Segura.

Datos

-Perú es el décimo productor de oro en el mundo, el segundo productor y primer exportador en América Latina. Además, es el segundo productor de plata a nivel mundial y el cuarto exportador en América Latina.

-El evento fue organizado por ADEX en coorganización con Gercetur Cusco, la Municipalidad Provincial del Cusco, la Universidad Nacional San Antonio de Abad y PromPerú. Cuenta con el patrocinio de New Fashion Perú y Arin S.A. y el auspicio del Museo de Minerales Andrés del Castillo, Grupo UH, Aranwa Hotels y Gamarra Group.