La delincuencia sigue siendo uno de las grandes debilidades de la región latinoamericana y, particularmente, de nuestro país. De acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), correspondientes al periodo de mayo – octubre del 2019, a nivel nacional urbano, 1 de cada 100 personas de 15 y más años de edad es víctima de robo de negocio.
Y es que, si bien se vienen tomando medidas para prevenir o reducir el índice de robos, aún no es suficiente, ya que más allá de implementar leyes o normas, se trata de generar una consciencia sobre la seguridad tanto en el ámbito laboral como personal.
“Cada vez son más las empresas peruanas que se preocupan por la seguridad y que son conscientes de los riesgos a los que están expuestos”, indica Alejandro Arribas, gerente de seguridad del Grupo EULEN Perú.
La seguridad es la adopción de una serie de previsiones que buscan reducir los puntos vulnerables de una institución. Es decir que si una empresa no cuenta con buenas prácticas de seguridad incrementa su nivel de riesgo interno (hurto realizado por un colaborador) y externo (robo por una banda delincuencial), puntualiza el ejecutivo.
Industrias vulnerables
Entre los rubros más afectados por la inseguridad se encuentran el comercio al por mayor y la industria manufacturera, según menciona el Plan Nacional de Seguridad Ciudadana 2019 – 2023. Por tal motivo, las empresas que se desenvuelven en tales mercados deben fortalecer su cultura corporativa basada en la seguridad, pues resulta fundamental para identificar, medir y reducir los riesgos evitando eventos que puedan afectar la continuidad del negocio.
“En este punto es relevante precisar que todos los colaboradores son parte de la seguridad portando su identificación y colaborando con los controles establecidos”, afirma Arribas.
Aspectos tecnológicos
Actualmente, la tecnología es considerado como un aliado para la seguridad a todo nivel. Su acceso permite una detección anticipada y con ello, la prevención de riesgos. En ese sentido, las cámaras de reconocimiento fácil y Smart Tracking, así como los controles de accesos con verificación biométrica para evitar la suplantación de identidad, serán clave en el proceso de prevención.