- Cada vez es mayor el interés por las tecnologías para la infraestructura en el país
- Sistemas integrados y electricidad 4.0, son dos de los aspectos que exige el nuevo mundo
El tiempo para modificar la trayectoria del cambio climático comienza con elementos esenciales de la ciudad como los edificios. Estos deben modernizarse para ser parte fundamental en el cambio y la descarbonización de la mano de la tecnología actual.
Para países de Latinoamérica, el concepto de edificios inteligentes ya es conocido, sin embargo, se sigue explorando su implementación, teniendo avances notorios centrados principalmente en la experiencia de los usuarios y los beneficios costo eficientes para las empresas. Para lograr un mejor desarrollo, se acerca un nuevo capítulo en la historia de estos, donde están asumiendo nuevos roles e impulsando nuevos modelos de negocio.
Según el más reciente estudio del analista IndustryARC, se estima que habrá un aumento en la inversión de la industria de la automatización de edificios en un 9,8% anualmente hasta el 2027. Dado esto, los nuevos modelos de negocio del sector de infraestructura deben estar cada vez más encaminados, hacia el cumplimiento de índices y estándares que imponen las normativas locales, con el desarrollo de proyectos en donde se involucren procesos sostenibles y de automatización.
Daniela Mora, directora de Digital Energy para el Clúster Andino en Schneider Electric, presenta las cinco razones y beneficios por los que invertir en un proyecto de edificios inteligentes es la tendencia para este 2023:
- Optimización de recursos. El tener un edificio inteligente involucra sistemas tecnológicos que se caracterizan por el consumo no solo de energía, sino también de agua y otros recursos. El poder invertir en un proyecto de estos debe integrar un sistema de control y monitoreo para acciones como, la iluminación, aire acondicionado, entre otros servicios, que podrán ser manejados de forma correcta y sostenible.
- Aporte al medio ambiente. Ya que los edificios son los responsables de aproximadamente el 30% de las emisiones de CO2, el poder participar de un proyecto para un edificio inteligente le brindará la seguridad de poder contribuir para las metas planteadas por el país en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030.
- Ahorro. Si bien en estos momentos los costos en materiales y del servicio de energía se categorizan como dos aspectos actualmente en alza, el mantenimiento de los sistemas de los edificios es clave para generar ahorros y evolucionar o migrar a un mantenimiento basado en condiciones.
- Visibilidad y diferenciación. Latinoamérica aún no es reconocida por los edificios inteligentes, pues es un ámbito de gran competitividad, sin embargo, se convierte en una oportunidad ideal y diferencial para realizar un aporte en esta materia al país. Uno de los casos de éxito más recientes es Terranum de Colombia, quienes desarrollan y operan proyectos inmobiliarios y han implementado en la totalidad de sus edificios la solución EcoStruxure Building de Schneider Electric, teniendo un gran potencial logrando eficiencias energéticas del 15% al año, optimizando recursos de mantenimiento en un 10% y la solución de problemas de forma remota en un 30%.
- Productividad para las personas. El desarrollo de este tipo de proyectos para las empresas, mejora no solamente la calidad de vida de sus usuarios, sino que permite aumentar la productividad de los negocios, pues se involucran factores como el mejoramiento de la calidad del aire. Un aspecto relevante a la hora de optar por un proyecto de un edificio inteligente, pues le permitirá tener un nivel de satisfacción con relación a la experiencia que puedan tener las personas en estos nuevos espacios.
Es así como los sistemas integrados y de electricidad 4.0, se convierten en las principales necesidades para los edificios inteligentes del nuevo mundo, las cuales son indispensables para el desarrollo y cumplimiento de este tipo de proyectos que combinan tecnología y sostenibilidad.