El offboarding, los incentivos y el liderazgo activo fortalecen el vínculo con colaboradores y mejoran la imagen organizacional.
En el entorno corporativo actual, tanto el onboarding como el offboarding son etapas fundamentales para asegurar una experiencia laboral positiva y construir una sólida reputación organizacional. A pesar de su importancia, muchas empresas siguen subestimando el impacto que tiene el proceso de desvinculación en sus estrategias de retención y marca empleadora. Por ello, Stanton Chase y Talana presentan recomendaciones clave para optimizar estas fases y fortalecer el vínculo con los colaboradores.
1. El valor de un offboarding memorable: Este proceso no solo marca el cierre de la relación laboral, sino que también es una oportunidad para mantener el vínculo con los colaboradores. Implementar entrevistas de salida objetivas es esencial para recopilar información valiosa que permita identificar áreas de mejora en la experiencia del empleado.
2.Reconocimientos que conectan: Cuando se diseñan incentivos o reconocimientos, es importante que estén alineados con las necesidades e intereses de los colaboradores. Por ejemplo, un viaje como incentivo debe ser una experiencia gratificante, no un motivo de estrés. Asegurarte de que los incentivos conecten emocionalmente puede marcar la diferencia en la percepción de tu empresa.
3.La experiencia trasciende el ámbito interno: Los colaboradores felices o insatisfechos suelen compartir sus experiencias en plataformas como Glassdoor o TikTok, influyendo en la percepción externa de la empresa. Por ello, cada etapa del ciclo laboral debe gestionarse de manera estratégica para garantizar una imagen positiva y auténtica de la organización.
4.Conexión entre el negocio y las personas: No es posible diseñar un plan de trabajo efectivo sin conocer a profundidad el negocio y a las personas impactadas. Esta conexión debe fortalecerse desde el onboarding y mantenerse mediante procesos efectivos que promuevan la integración y el desarrollo.
5. El rol clave de los líderes: Los líderes desempeñan un papel fundamental en la experiencia de los empleados. Su participación activa en la recopilación de información y en espacios como focus groups cruzados permite que los colaboradores expresen sus inquietudes y necesidades libremente, fomentando un ambiente laboral saludable y colaborativo.
Al implementar estas prácticas, las empresas no solo mejoran la retención de talento, sino que también fortalecen su reputación como empleadores, creando una experiencia laboral memorable en todas las etapas del ciclo laboral.