En la era actual, donde los entornos laborales son dinámicos y competitivos, la salud mental se ha convertido en el intangible más valioso de las empresas. Ésta impacta directamente sobre el rendimiento, influye en las probabilidades de retención del talento y es central para una cultura organizacional positiva, fomenta la innovación y ayuda a fortalecer la imagen de marca empleadora.
Abordar el bienestar de los colaboradores cada día se torna más relevante y, en ese marco, la psicología laboral emerge como una herramienta crucial de la mano de los equipos de Recursos Humanos. Según el estudio Burnout 2023, para finales de noviembre, el 78% de los peruanos señaló sentir estrés laboral crónico, cifra preocupante y que torna imperativo que las organizaciones cuenten con expertos en psicología laboral que puedan encargarse de estudiar el comportamiento en el entorno de trabajo y de implementar iniciativas que permitan establecer hábitos laborales más saludables.
Pero ¿qué factores afectan la salud mental en el trabajo? La magnitud y la rapidez de los cambios que atraviesan e impactan sobre el entorno laboral, así como los encuadres de trabajo que habilitan desigualdades, las cargas excesivas de tareas, el control insuficiente del desempeño y la inseguridad laboral representan un riesgo para la salud mental y pueden llevar a trastornos físicos y mentales, ausentismo, pérdida de productividad, advierte la Organización Mundial de la Salud (OMS). Además, indica este organismo, la pérdida de productividad relacionada con la depresión y la ansiedad (los dos trastornos de salud mental más prevalentes en el mundo) cuestan a la economía mundial U$S1 billón al año.
En este sentido, Ana Paula Durán, Customer Success Manager en VISMA LATAM, expertos en soluciones para recursos humanos, expone que “La salud mental laboral refiere al bienestar psicológico, emocional y social de las personas en sus entornos de trabajo. Algunos signos de que esta está en deterioro pueden ser falta de compromiso, bajo rendimiento laboral, baja productividad, dificultades para establecer una comunicación eficaz y complicaciones para la toma de decisiones. Es responsabilidad de las organizaciones velar por el bienestar integral de sus trabajadores, está en manos de ellas implementar estrategias que busquen mejorar la salud mental laboral y que vayan más allá de espacios de mindfulness. Por ejemplo, enfocarse en la flexibilidad, prevenir el agotamiento, desarrollar el sentido de pertenencia y crear una cultura que valore el equilibrio entre la vida profesional y la personal”.
Es por esto que la experta en RH señala algunas claves de la psicología laboral para mejorar e impactar de manera positiva en la salud mental en las organizaciones:
- Cultivar un entorno de trabajo positivo: esto implica crear una cultura organizacional que promueva la empatía, el respeto y el apoyo mutuo.
- Identificar factores de riesgo y protección: mediante evaluaciones regulares y encuestas de bienestar, se pueden detectar áreas de mejora y diseñar estrategias específicas para abordar los desafíos identificados.
- Implementar programas de bienestar emocional: estos pueden incluir talleres de gestión del estrés, acceso a servicios de asesoramiento psicológico y otras iniciativas que promuevan la buena salud mental y brinden a los empleados las herramientas necesarias para afrontar las dificultades de su vida laboral.
- Fomentar el balance vida-trabajo: lo que implica ser el eslabón de comunicación con los niveles de liderazgo para favorecer la implementación de políticas que promuevan horarios razonables, flexibilidad laboral y la posibilidad de desconectar fuera del horario de oficina, así como el acceso a recursos especializados en salud mental.
- Promover la comunicación abierta: es parte del rol de RR.HH. delinear estrategias que les brinden a los colaboradores la libertad de expresar inquietudes, y crear espacios seguros para compartir sus experiencias y pedir el apoyo que pudieran necesitar.