Comprar piratería no es una inversión: la información es clave

Vocera: Norma Merino García, Gerente del programa de antipiratería y fraude para las Américas para HP Inc.

La falsificación de artículos en la industria tecnológica cada vez cobra mayor presencia. En Latinoamérica, la piratería de software ocupa el primer lugar, seguido por la venta de suministros como los cartuchos de tinta y tóner para impresora. En base a esto último, la fabricación y venta de estos suministros se ha incrementado de manera ilícita, siendo esta falsificación una amenaza que impacta globalmente en $509,000 millones, lo que representa el 3.3% del comercio mundial y para este año 2022, se espera que crezca a $991,000 millones, según lo indica el reporte sobre ‘Tendencias en el comercio de productos falsificados’, realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OECD, en sus siglas en inglés).

En nuestro país, ciertas industrias y entidades suelen comprar de forma intencional dichos consumibles falsificados debido a que los encuentran con una diferencia considerable en precio o, también, si la compra la realiza una empresa de tecnología, se les ofrece estos productos con una tarifa similar a los originales, engañando a los consumidores, ya que en muchas ocasiones las etiquetas o empaques incorrectos son difíciles de notar, pudiendo afectar el funcionamiento de los productos donde sean instaladas, y eventualmente invalidar su garantía.

¿Cómo contribuir a detener el avance de la piratería? Desde el lado del consumidor podemos hacer mucho, como informarnos de los peligros y costos adicionales que trae comprar cartuchos de tinta y tóner falsificados, debido a que ofrecen una impresión de baja calidad, un elevado riesgo de fallo de la impresora, consecuencias medioambientales y altos costos por mantenimiento de los equipos, así como la exposición a sustancias que pueden ser altamente tóxicas para la salud. Por ello, comprar piratería no es una inversión, porque el consumidor puede estar arriesgando no solo su economía, también su seguridad.

En HP siempre recomendamos comprar a través de distribuidores autorizados y que tengan buena reputación. Además, tenemos el programa Antipiratería y fraude (ACF), con más de 15 años de actividad, diseñado con una variedad de recursos para ayudar a generar mayor conciencia sobre los peligros de la falsificación y ofrecer servicios para ayudar a los clientes a protegerse de compras fraudulentas. Es el programa contra la falsificación más sólido de la industria, respaldado por cinco pilares: investigaciones, gestión de canales, concientización, producto y embalaje; y asuntos legales.

Adicionalmente, HP brinda asesoría a los clientes ante cualquier duda que tengan al momento de realizar la compra. Y ofrecemos herramientas, como la lectura de códigos QR que permiten verificar la autenticidad del producto antes de adquirirlo.

Por último, cabe resaltar que la piratería es un problema real que expone a las empresas y al usuario de a pie; y, en definitiva, no existe una razón positiva para adquirir un producto falsificado. Por consiguiente, es importante estar informados, conocer el producto que se va a comprar. El conocimiento nos empodera y nos da las herramientas necesarias para identificar la legitimidad de los artículos y cuidar nuestra inversión.