Cesar Peñaranda – Diciembre 2018
A comienzo de año se pensaba que este 2018 podía ser un periodo bastante mejor, la mayoría de las proyecciones (MEF y Banco Central de Reserva) estaban por encima de 4 puntos. Sin embargo, vino el quiebre del gobierno de Pedro Pablo Kuczynski, que creó todo un marco de inestabilidad política, jurídica y económica. Menos mal que la transición con el presidente Vizcarra, respetando el marco constitucional, significó algo bueno para la imagen del país, como modelo constitucional apaciguando la crisis de gobernabilidad que se generó en ese entonces.
Nosotros proyectamos que el año terminará en 3.8 puntos y el próximo año en 3.7. Esta cifra es mejor que el año pasado y eso se debe a que la demanda interna (consumo e inversión) ha crecido a una tasa mayor que la del año pasado. El 2017 el consumo privado creció en 2.5 y este año estamos estimando que va a crecer alrededor 3.6 puntos.
Y es importante mencionar el consumo privado y darle énfasis, porque la mayoría de mis colegas economistas hablan mucho de la inversión. Este concepto actualmente, pesa poco menos del 18 % del PBI, pero el consumo privado pesa 64% del PBI, es decir, si el consumo privado crece jala la economía porque su ponderación en el PBI es fuerte. Por ello, nosotros estimamos que la inversión privada crecerá 5.2 este año. Recordemos que este indicador venía de tasas negativas y el año pasado la inversión privada fue casi cero.
El mix hace que la demanda interna crezca por encima del PBI y eso explica este 3.8 que estamos calculando. Esta situación no es buena porque el país necesita crecer a una tasa mayor de 4. A pesar que estamos mejor a nivel regional, si crecemos a 3.8 estaríamos haciéndolo por debajo del ámbito mundial, lo cual es preocupante, porque si el Perú pretende asociarse con los países del primer mundo debería crecer por encima del 6% de manera sostenida.
Por otro lado, lo sorprendente de este año es que la inversión pública no creció como se había previsto. El estimado nuestro es que va a crecer en 5.5. No es que esta inversión tenga una ponderación muy alta en el PBI, pero que crezca una tasa alta 17% jala un poco más de inversión privada, la inversión pública tenía un desempeño deficiente, una tasa de alrededor de 5% o 6% no es buena. Eso ha determinado que el PBI este por debajo del 4% este año.
Por último, mirándolo por el lado de la demanda, las exportaciones han seguido creciendo pero a una tasa sustancialmente menor que la de los dos últimos años. Las exportaciones en el 2016 crecieron 9.4, el 2017 creció 7.8 y este año estimamos que las exportaciones van a crecer 2.5, una tasa bastante menor.
Entonces si uno lo mira por la demanda, vemos que el PBI va a crecer a 3.8, jalado fundamental con el crecimiento de la demanda interna, no de la demanda externa que son las exportaciones. Y en la demanda interna, sustancialmente por el consumo privado.
Es bueno que la inversión privada crezca, pero lo que hay que resaltar es que lo que jala más el PBI a 3.8 es este concepto. Cuando uno lo mira por el lado de la oferta (sectores) lo que explica el crecimiento este año, son el sector pesca con un crecimiento estimado de 15% cuando el año pasado este sector creció 4.7%. Sin embargo, el sector pesca no pesa mucho en el PBI, pero cuando crece ayuda al crecimiento de la manufactura tradicional. Entonces el sector pesca ha tenido un buen año.
El sector minero estaría creciendo casi 4, cuando nosotros consideramos que caería a 1, ya que minería no tuvo un buen año, aunque nosotros consideramos que la minería crecerá por una mayor inversión.
En conclusión, para el próximo año, la inversión pública crecerá menos que este año, la inversión privada se mantendrá un poco mejor, el consumo privado crecerá ligeramente por debajo de lo que ha crecido este año. Estamos proyectando un crecimiento de las exportaciones ligeramente mejor que este año. Eso hace que el PBI crezca casi como este año. La previsión no es muy buena.
Esto podría agravarse si el clima político se torna mas denso y gris. Es decir, si la situación política empeora con nuevos casos de corrupción. Incluso, el Banco Mundial ha lanzado estimaciones no alentadores para la economía, sólo queda aprovechar todo lo avanzado y mejorarlo con esfuerzo y dedicación.