- El proyecto PUCP-UPC que se exhibirá en la bienal ha desarrollado un software que permite conceptualizar y diseñar objetos con formas complejas, para su posterior reproducción utilizando la impresión tridimensional.
Una delegación compuesta por investigadores de la PUCP y de la UPC participará en la octava edición de la bienal de arte digital de Lima ‘Artware’, con el proyecto ‘Procesos generativos analógicos y digitales para la escultura y el diseño industrial. Fabricación digital, técnicas tradicionales y biomateriales’.
Este proyecto, ganador del Concurso Anual de Proyectos de Investigación (CAP) PUCP 2021 en la categoría de Investigación-creación, se centra en la exploración de metodologías de generación y construcción de objetos. Para ello, incorpora tecnologías analógicas y digitales, así como técnicas constructivas manuales y de fabricación digital, utilizando materiales naturales y producidos.
De este modo, la investigación responde a la necesidad de desarrollar un software original y tecnología inclusiva y sostenible para la puesta en valor de la diversidad biológica y cultural, situándose en un territorio de relación entre la naturaleza, el arte, el diseño, la ciencia y la ingeniería.
“Nuestro objetivo es expandir las posibilidades en la concepción, configuración y construcción de objetos para el arte y el diseño, cuyas características dependen de estos entrecruzamientos de ida y vuelta entre lo analógico y lo digital”, afirma la Dra. Veronica Crousse, coordinadora del proyecto y decana de las Facultad de Arte y Diseño.
Arte digital con metodología interdisciplinaria
El equipo interdisciplinario de investigadores del proyecto comprende escultores, diseñadores industriales e ingenieros de la PUCP y un artista programador de la UPC. En ese sentido, uno de sus objetivos ha sido generar metodologías de trabajo que le permitan a investigadores y profesionales de ramas diversas interactuar en proyectos.
“Creo que esta investigación nos ha dado la oportunidad de aprender a trabajar como equipo desde disciplinas normalmente no asociadas entre sí, trayendo tecnologías de programación al mundo del arte y el diseño industrial”, comenta al respecto Crousse.
Como reflejo de la naturaleza interdisciplinaria de la investigación, el proyecto se ha trabajado en lugares distintos del campus, que incluyen al Centro de Tecnologías Avanzadas de manufactura (Cetam) de Ingeniería, la Sala VEO, así como los laboratorios y talleres de la Facultad de Arte y Diseño.
De la naturaleza al arte por medio de la tecnología
La investigación ha venido desarrollando un software con parámetros que permitan modelar de manera rápida formas complejas, que luego puedan ser reproducidas a través de la impresión tridimensional. En el caso de este proyecto, los investigadores se inspiraron en formas que se encuentran en la naturaleza para diseñar sus objetos.
“Con el desarrollo de la tecnología se pueden integrar nuevas soluciones que permitan mejorar la calidad, la complejidad y las dimensiones de este tipo de trabajos”, explica el Mag. Michel Sigüenza, ingeniero mecatrónico y coinvestigador del proyecto.
Uno de los innovadores objetos desarrollados a través de esta técnica y que se exhibirá en la bienal es un brazo robótico, cuyo objetivo es emular los movimientos de una persona. “Nuestra meta es que este software esté a disposición del estudiante que busque crear, probar y replicar formas complejas, contando con un manual o un equipamiento pequeño”, precisa Sigüenza.
“Buscamos que se puedan desarrollar diseños eco amigables, a través del uso de materiales de la naturaleza que normalmente se desechan, como las conchas de abanico o los hongos de champiñones”, complementa la Mag. Midori Sánchez, coinvestigadora del proyecto y especialista en el manejo de impresoras 3D. “La idea es que este tipo de material pueda ser reutilizado por estudiantes de arte al momento de elaborar sus proyectos”, añade.
Montaje inmersivo
En la bienal, el proyecto se exhibirá como un montaje que muestra el proceso en desarrollo de la investigación. Con ello se busca que los visitantes tengan la experiencia de ingresar al taller de trabajo de un artista y creador.
“Pretendemos recrear el espacio de trabajo interdisciplinario, presentándolo como un laboratorio donde las ideas están interrelacionándose y materializándose en procesos y productos, en una interacción horizontal entre ideas, tecnologías, materiales, procesos, herramientas y piezas en producción”, explica Veronica Crousse.