Según el Programa Nacional Aurora del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, en el periodo de enero a octubre del 2021 se reportó que, más del 70% de víctimas no trabajaban (de forma remunerada), siendo el 38,4% mujeres entre 18 y 59 años.
Para el año 2020, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), el porcentaje de mujeres sin ingresos propios fue del 36%, mientras que la de los hombres fue del 19.7%. Asimismo, en dicho periodo la tasa de participación de las mujeres en el mercado de trabajo fue de 55%, mientras que la de los hombres fue de 76.2%.
A menudo, cuando se habla sobre la violencia hacia la mujer y las distintas iniciativas para prevenirla, pocos se centran en la importancia de la autonomía económica como una gran herramienta de empoderamiento femenino. Esta no solo promueve la igualdad de género y el desarrollo del país, sino también aumenta el poder de decisión de las mujeres en todos los ámbitos de su vida, como el de abandonar entornos abusivos.
La autonomía financiera no solo implica tener ingresos propios, sino también acceso a recursos y educación. Por ello, el Lic. Omar Saavedra, docente del programa Asistente Contable y Financiero de Educación Continua del Instituto Carrión, en torno el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer (25-noviembre), brinda herramientas básicas contables para potenciar los negocios femeninos y promover la autonomía económica de las emprendedoras.
“La Contabilidad es el lenguaje de los negocios, es la ciencia a través de la cual se registran los hechos económicos y, mediante un proceso contable, se convierten en Estados Financieros. Estos son fundamentales para tomar decisiones objetivas en un negocio, por lo que conocer el rubro no es suficiente para gestionar adecuadamente un emprendimiento”, afirma al respecto el especialista del Inst. Carrión.
Asimismo, brinda los siguientes consejos:
- Educación financiera. Buscar oportunidades de capacitación en temas contables y financieros fortalece la toma de decisiones informadas. Talleres, cursos en línea o asesoramiento profesional pueden ser útiles.
- Organiza los registros financieros y mantenlos actualizados. Llevar un registro detallado de todos los gastos y ganancias es fundamental para tener una visión clara de la salud financiera del emprendimiento. Estos deben de registrarse diariamente y evitar demoras. Asimismo, debes automatizar los procesos contables para mejorar la precisión y colocarles foco a los reportes de cuentas por cobrar, cuentas por pagar e inventarios, considerando que son los rubros de mayor importancia en una empresa.
- Realiza el seguimiento de pagos de tus clientes. La facturación a los clientes es sumamente importante. De ahí, muchas veces, depende la liquidez de la empresa, el pago oportuno de los tributos, el sustento financiero y tributario de auditorías internas, externas o entidades fiscalizadoras. Elabora un reporte de cuentas por cobrar a clientes de tal forma que se convierta en una herramienta de gestión para futuras cobranzas.
- Optimiza el proceso de facturación. Para ello, utiliza un software de facturación (facturación electrónica), define fechas de corte anual si la facturación es a crédito, automatiza el envío de la factura y utiliza la nube para almacenar las mismas.
- Reduce costos y aumenta la rentabilidad. Esto implica aumentar los ingresos y reducir costos. De esta forma se obtendrás mayor utilidad. Para ello, debes crear conciencia del ahorro, medir los costos y gastos, renegociar contratos con proveedores, mejorar la gestión de procesos, evaluar la utilización de tecnología, considerar el trabajo remoto, evitar cambios seguidos de personal y deshacerte de productos de baja rotación.
