El comercio electrónico B2B, también llamado Business to Business, viene alcanzando un gran crecimiento a nivel global, a raíz de la crisis sanitaria; llevando a los negocios a adaptarse continuamente a las exigencias del sector mediante el uso de herramientas digitales, a fin de generar confianza entre sus clientes, posicionar sus productos e incrementar sus ventas.
El portal de análisis y datos financieros MarketWatch destacó que el tamaño del mercado mundial de Ecommerce B2B, podría alcanzar los 13,630 miles de millones de dólares para 2027. Además, tendrá una tasa anual de crecimiento del 8,5%, es decir, un incremento de hasta 90% en productos comprados en línea.
Teniendo en cuenta que el comprador Business to Business tiene diferentes exigencias que un comprador B2C (Business to Consumer), Ecomsur, empresa líder en Fullcommerce®, que brinda una solución integral de comercio electrónico, da a conocer cinco tendencias que marcarán el comercio electrónico B2B este el 2023, con el objetivo de estar preparados frente a nuevos retos.
- Fijación de precios en tiempo real. Es importante estar al tanto del contexto económico, las condiciones del mercado, necesidades de los consumidores, así como el costo que el cliente está dispuesto a pagar por un producto o servicio. En ese sentido, la fijación de precios en tiempo real permitirá a los proveedores la posibilidad de administrar los montos de manera simultánea para los usuarios en todos los canales (online y offline). Se prevé que en los años que vienen las empresas B2B podrán manejar precios personalizados también en tiempo real.
- Mejorar la experiencia de los clientes. Esta tendencia que proviene del B2C, pero que ya no es propia de éste, se trata de observar el proceso de compra -a través de la recopilación de datos- en múltiples puntos de contacto valiéndose de la omnicanalidad, para medir cómo afecta este comportamiento en los resultados comerciales.
Hoy en día, mediante el comercio unificado se hace posible mejorar esta experiencia, gestionando toda la información del negocio desde una sola plataforma, para que todo el proceso sea homogéneo. Así, los compradores podrán combinar los pedidos en línea con el servicio al cliente, fuera de línea, o incluso, con el recorrido dentro de la tienda, mientras esperan que sus facturas se actualicen automáticamente.
- Diversidad en métodos de pago. En los últimos dos años, la mayoría de transacciones B2B y de comercio electrónico involucró la automatización de los pagos, haciéndolo más conveniente para ambas partes. Para este 2023 se espera que esta tendencia continúe con una gran selección de opciones, tales como: tarjetas de crédito, cheques, órdenes de compra, billeteras móviles, entre otros. Es importante tener en cuenta que, un sistema de pago fácil, permitirá también mejorar los procesos internos y la experiencia del cliente.
- Potenciar las herramientas digitales. En este 2023, las empresas B2B deben mirar más allá de las formas tradiciones de trabajar y expandir sus herramientas digitales haciendo uso, por ejemplo, de un CRM (Customer Relationship Management en inglés), con el cual podrán implementar estrategias de marketing efectivas y gestionar las relaciones con los clientes de manera organizada y optimizada. A medida que esto suceda, empezarán a ampliar sus equipos de comercio electrónico, así como también sus ofertas; adaptándose a las necesidades cambiantes del mercado y de los consumidores.
- Impulso de la omnicanalidad. Según un estudio realizado por McKinsey & Company a los compradores B2B les gusta tener la opción de conectar con un negocio a través de distintos canales: presenciales, digitales y autoservicio digital, dependiendo de la situación.
Si una marca desea resaltar sobre la competencia, la omnicanalidad es fundamental junto a una estrategia contundente que ayude a cumplir sus objetivos. La clave está en contar con diversas formas de conectar con los clientes, pero que todas formen parte de una experiencia unificada. Esto es, mantener actualizada la información, solicitudes, pedidos y cualquier comunicación en todos los medios que se utilicen.
El comercio electrónico Business to Business al igual que el Business to Consumer, debe adaptarse a las necesidades de los usuarios, lo cual implica desarrollar el mayor grado de personalización posible, apoyándose en las nuevas tecnologías, esenciales para continuar creciendo en el mercado.