EDGE Building: ¿por qué es la certificación de edificaciones verdes que más crece en la región?

  • Para José Bonivento, líder de auditores EDGE de SGS para América Latina, una de las principales razones es que se adapta al nivel de madurez que las edificaciones tienen en temas de sostenibilidad en países emergentes.

Creado en el 2015 por la Corporación Financiera Internacional (IFC, por sus siglas en inglés), miembro del Grupo Banco Mundial, EDGE Building es el sistema de certificación de edificaciones verdes que más crecimiento viene experimentando en los países emergentes, incluyendo entre estos a los de América Latina.

De acuerdo con información de la IFC, a marzo del presente año había en el Perú más 2 millones de metros cuadrados acreditados con la certificación EDGE, siendo el tercer país de América Latina que más había implementado esta última, después de Colombia y México, con 14 millones y 4 millones de metros cuadrados, respectivamente.

“EDGE inició como una gran alternativa para los países emergentes porque se adapta al nivel de madurez que las edificaciones tienen en temas de sostenibilidad, centrándose en tres aspectos cuyas eficiencias generan impactos significativos en la edificación: el consumo de energía, de agua y el carbono incorporado en materiales. Con esto, la transformación de la cadena de valor de la construcción verde será inclusiva para todos los tipo de edificación, desde viviendas sociales hasta oficinas inteligentes.”, explica José Bonivento, líder de auditores EDGE de SGS para América Latina.

En ese sentido, Bonivento comparte a continuación las principales características de las certificaciones EDGE:

Tecnología accesible. Edge tiene una poderosa plataforma digital sin costo que ofrece una línea de base a partir de la cual las empresas que buscan desarrollar proyectos sostenibles pueden, de manera muy amigable, modelar los sistemas pasivos, activos y sostenibles del edificio. La línea de base se adapta automáticamente a la ciudad en la que se desarrolle el proyecto a evaluar. La plataforma tiene una calculadora integrada y revela el impacto ambiental y financiero de cada una de las estrategias de sostenibilidad que se aplican en el proyecto.

Público objetivo. EDGE se aplica a todo tipo de edificación con envolvente (es decir, con cobertura, ya sea de vidrio o aluminio, etc.). Pueden ser proyectos de viviendas, oficinas, comercios, hoteles, entre otros. Una de las excepciones son las fábricas cuyos procesos productivos generan más consumos energéticos que la misma operación de la edificación, con lo cual el impacto de la edificación no sería significativo.

Metas. La certificación Edge se otorga cuando la edificación tiene una gestión que genere eficiencias de al menos 20% en energía, en agua y en carbono incorporado en materiales. Si se logran ahorros de más del 40% en energía, se obtiene la certificación Edge Advance.

Ambas certificaciones se otorgan a edificaciones nuevas que se encuentran en las etapas de diseño y construcción; o a edificaciones existentes. Si estas últimas tienen el nivel EDGE Advance por al menos un año, pueden evaluar sus operaciones y, de ser el caso, aplicar a la certificación EDGE Zero Carbon, que exige un 100% de ahorro de energía logrado ya sea a través de energías renovables o compensaciones de carbono.

Pasos. Para postular lo primero es ingresar a la plataforma y registrar en esta, de forma gratuita, los atributos del proyecto que se desea acreditar. La certificación se otorga de manera preliminar, si se cumplen las exigencias antes descritas aún sin haber construido el proyecto. Una vez que el proyecto se construye, se tiene una auditoría presencial para verificar que cumple con la data ingresada a la plataforma, luego de lo cual se otorga un certificado final.

Tiempo. Obtener el certificado preliminar toma dos meses; y el certificado final, otros dos más. En total, todo el proceso toma cuatro meses. Si la edificación es existente, el proceso tarda dos meses aproximadamente.

Por último, Bonivento resaltó que SGS tiene un consorcio con la firma Sintali para realizar la auditoría y la certificación Edge en América Latina. “La ventaja es que este consorcio permite a las empresas realizar el proceso de auditoría y certificación a través de un solo interlocutor, garantizando la calidad del mismo. Nuestro objetivo con este servicio es promover las construcciones sostenibles en la región”, finalizó.