Por: Diana Velásquez Vargas
Anteriormente, Global Innovation Consulting determinó en una columna pasada que la actual situación de pandemia llevaría a una transición al dinero digital. Efectivamente, el día de ayer la encuestadora IPSOS Perú publicó los resultados de una encuesta a 1000 habitantes del país en la cual se observaba los cambios en sus comportamientos en distintos ámbitos.
Se reveló que el 65% ha empezado, mantenido o aumentado el uso de pagos digitales a raíz del coronavirus, tal como determinó nuestra consultora a través de su informe Punto de Quiebre después del COVID-19 en marzo del presente año.
Sin embargo, ahora corresponde el siguiente paso: normalizar esta nueva costumbre entre clientes y vendedores. Los beneficios de decirle adiós al dinero en papel han sido predichos desde antes de la pandemia. Por ejemplo, un artículo en el Wall Street Journal, en septiembre de 2019, explica que no solo toda transferencia monetaria sería más rápida para los consumidores, sino que también los bancos se beneficiarían con menores costos, políticas económicas más eficientes y una red de pago más segura en general.
En Perú, solo el 38,1% de ciudadanos tiene una cuenta bancaria. Al darse cuenta el gobierno de esta dificultad para tener una red económica más eficiente, ha propuesto que para el próximo año más personas abrirán una cuenta. De ser así, más niveles socioeconómicos y servicios bancarios accederán a los beneficios de la seguridad del dinero digital.