La segunda ola del COVID-19 obliga a replantear la administración de ingresos de miles de peruanos, que priorizan contar con un fondo para afrontar problemas de salud o tiempos difíciles y realizar un manejo adecuado de sus finanzas, sostuvo Milagritos Seminario, gerente de Productos y Canales de Caja Piura.
La especialista indicó que, el ahorrista peruano, luego de la experiencia vivida en la pandemia, asumió la necesidad de contar con un fondo que asegure escenarios de contingencia. Los sectores A, B y C cambiaron el destino que mantenían para sus ahorros (viajes, compra de inmuebles, inversiones) en años previos y resguardan hoy en día su dinero principalmente para contingencias de salud.
“Antes de la pandemia el índice de ahorro de las mujeres era más elevado que el de hombres. Ahora la situación cambia, los varones inciden en conservar más sus ingresos, no solo para ayudar a sus familias directas, sino también a parientes y amigos. De la pandemia se debe rescatar la solidaridad, la unión familiar y los nuevos hábitos de ahorro adquiridos por las personas declaró la ejecutiva de Caja Piura.
Seminario afirmó que el ahorro es una alternativa viable para todas las personas que puedan hacerlo y encuentran en la conservación de su dinero una alternativa y necesidad para mejorar o mantener su calidad de vida. Una vez se empiece a recuperar la economía, y luego de la experiencia del 2020 es posible que muchas familias, en el mediano plazo, ahorren para protegerse de futuras situaciones difíciles.