Las personas y el medioambiente deben ser el eje central de las necesidades futuras de las ciudades.
En el año 2050 el 70% de la población mundial vivirá en las ciudades, lo que demandará una gestión diferente de las megas ciudades que sobrepasan los 10 millones de habitantes y donde el desarrollo de las Smart Cities es un proceso imparable en un mundo globalizado.
“La evolución de las ciudades, a través de las civilizaciones siempre ha ido de la mano de las tecnologías de la época, sabemos que cada metrópoli tiene sus propias dificultades y muchas veces los problemas superan a las soluciones; para hacer frente a las necesidades futuras de los ciudadanos es imprescindible estar preparados”, señaló Giovanna Castagnino, presidente de Desarrollo Urbano Sostenible (DUS), organización no gubernamental enfocada en el planeamiento estratégico para crear ciudades sostenibles.
En la más reciente publicación del Índice IESE Cities in Motion (ICIM) 2024, en donde se analiza el desarrollo de 183 ciudades de 92 países, Lima se ubica en el puesto 144 como ciudad inteligente, y respecto a América Latina en el puesto 11. Los criterios para dicha posición van más allá del uso de la tecnología como elemento crucial para las ciudades, también son fundamentales la gobernanza, planificación urbana, impacto ambiental, cohesión social, movilidad y transporte, capital humano, economía y la proyección internacional.
“Una Ciudad Inteligente o Smart City persigue mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, considerando al individuo y el medioambiente como eje central de esta nueva forma de convivencia, donde el desarrollo sostenible y responsable de los recursos y servicios como el transporte, la energía, la salud, la seguridad, conectividad van de la mano de una gestión eficiente”, para la mejora de la calidad de vida del ciudadano y generar una línea económica competitiva con mercados internacionales; sostuvo la representante de DUS.
Por su parte, Orlando Ardito, Gerente General de la Asociación Gremial de Productos Eléctricos Internacionales del Perú, indicó que uno de los retos para hacer posible que nos encaminemos a una Ciudad Inteligente es empezar por la seguridad eléctrica – de la mano productos y servicios de calidad – como base fundamental de la transformación tecnológica para el crecimiento y sostenibilidad de las ciudades.
Señaló que debemos planificar el futuro de las ciudades desde el punto de vista eléctrico: las cifras sobre conectividad se incrementarán todos los años, el número de dispositivos de telefonía móvil será casi igual al número de personas que viven en el planeta, actualmente tenemos más de 50 billones de dispositivos conectados; para el 2025 se espera que el número de vehículos eléctricos en todo el mundo ascienda a 76 millones, por ejemplo.
Ambas organizaciones, DUS y EPEI Perú, anunciaron la realización del Curso de Especialización Internacional, el 23 y 24 de octubre con el tema «Innovación en Infraestructura y Financiamiento para un país inteligente y sostenible», que contará con Enrique Ruz Bentué, conocido como el padre de las Smart Cities, figura clave en la transformación urbana, ofreciendo soluciones innovadoras a los crecientes desafíos de la sobrepoblación y la urbanización.
Ruz ha asesorado a distintas ciudades en México, Argentina, Panamá, España, la ciudad de Shanghái en China; aportando a esta última a la transformación como Smart City; sus aportes también se han extendido a instituciones en Polonia, además ha diseñado el plan de rentabilización de Smart City en Doha (Qatar), y el proyecto del Registro urbano para Colombia y la asociación Mexicana de Ciudades Inteligentes y su homónimo en Panamá, contribuyendo en la creación de políticas y regulaciones para ciudades inteligentes y edificios inteligentes.
Asimismo, estará como ponente Santiago Caprio, arquitecto, urbanista, es uno de los 31 asesores de ONU-Habitat, el grupo de trabajo de Naciones Unidas para crear modelos urbanos que combinan innovación tecnológica, participación ciudadana y sostenibilidad ambiental, siendo el responsable en la transformación social de El Salvador.