Entre aranceles, inflación y resultados récord

China ha adoptado una postura diplomática agresiva frente a las tensiones arancelarias.

En un contexto marcado por la creciente volatilidad económica, las tensiones comerciales y una avalancha de reportes corporativos, los mercados financieros han navegado una jornada densa en acontecimientos que delinean claramente las fuerzas que darán forma al panorama económico del segundo trimestre. Desde los efectos expansivos de las políticas arancelarias del expresidente Trump, hasta las reacciones corporativas en los sectores bancario, tecnológico y de lujo, pasando por los reacomodos macroeconómicos en Europa y Asia, la jornada deja entrever una serie de narrativas que convergen en una misma constante: la incertidumbre estructural del orden económico global.

En Estados Unidos, las expectativas de inflación vinculadas a la nueva oleada de aranceles han desatado respuestas mixtas en los mercados de deuda. El rendimiento del bono del Tesoro a 10 años se disparó a 4,592%, el nivel más alto desde febrero, provocando ventas masivas en los instrumentos tradicionalmente considerados refugio. El gobernador de la Reserva Federal, Christopher Waller, advirtió que la presión inflacionaria derivada de los aranceles podría ser transitoria, aunque el mercado interpreta con cautela esa posibilidad, especialmente considerando que la propia Fed ha debido revisar en múltiples ocasiones sus previsiones en los últimos ciclos. A pesar de ello, el índice dólar mostró señales de estabilización tras una caída de cinco días, mientras que las tasas de financiamiento aseguradas a un día se mantuvieron en 4,33%.

El sector bancario norteamericano mostró signos de fortaleza en medio de la volatilidad. Citigroup reportó ingresos por $21.600 millones en el primer trimestre, superando las estimaciones de $21.278 millones, con utilidades por acción de $1,96 frente a los $1,84 esperados. Destacaron ingresos en banca de inversión por $1.04 mil millones (vs. $939.8 millones estimados), así como sólidos resultados en FICC ($4.48 mil millones) y renta variable ($1.51 mil millones). Bank of America, por su parte, también superó expectativas con una ganancia de $0.90 por acción, ingresos netos de $27.37 mil millones y depósitos totales de $1.99 billones. La entidad proyecta ingresos netos por intereses de hasta $15.7 mil millones para el último trimestre del año. Sin embargo, el CFO advirtió que “la economía parece estar en una fase de crecimiento lento”, un mensaje que matiza la euforia de sus cifras.

El mercado bursátil estadounidense, si bien finalizó al alza en la última sesión gracias al impulso de Apple y exenciones arancelarias para productos electrónicos, enfrenta una creciente presión estructural. Goldman Sachs advirtió sobre “riesgos materiales” para la economía global derivados de la guerra comercial, incluso tras registrar ingresos récord en renta variable y anunciar un ambicioso programa de recompra de acciones de hasta $40 mil millones. Paralelamente, una encuesta de Bank of America reflejó que la confianza de los gestores de fondos hacia la economía estadounidense es la más negativa en tres décadas, anticipando una desaceleración del crecimiento global impulsada por aranceles.

El turismo también acusa recibo: se estima que EE.UU. podría perder hasta $20 mil millones en gasto turístico ante el temor de visitantes internacionales, exacerbado por la percepción de un ambiente político inestable. Mientras tanto, se intensifican las investigaciones de comercio sobre importaciones clave, incluyendo semiconductores y productos farmacéuticos.

En el plano corporativo, Johnson & Johnson superó expectativas con ventas trimestrales por $21.89 mil millones y utilidades ajustadas de $2.77 por acción, destacando ingresos por medicamentos innovadores ($13.87 mil millones) y tecnología médica ($8.02 mil millones). Netflix proyecta duplicar ingresos y alcanzar una capitalización de mercado de $1 billón para 2030, mientras que Nvidia anunció su nueva serie RTX 5060 desde $299 y recibió respaldo político con la promesa del expresidente Trump de agilizar todos los permisos necesarios.

La guerra comercial también dejó huellas profundas en Boeing. Las acciones de la firma cayeron 4% en premercado tras conocerse que China ha ordenado a sus aerolíneas suspender nuevas entregas de aviones Boeing, decisión que refleja un deterioro en las relaciones bilaterales. Simultáneamente, General Motors y Ford enfrentan el riesgo de recibir degradaciones crediticias por su exposición a nuevas barreras comerciales.

En Europa, los mercados mostraron repuntes moderados ante la posibilidad de una pausa en los aranceles automotrices por parte de EE.UU., mientras que el Banco Central Europeo continúa enfrentando señales mixtas. El índice ZEW de confianza económica en Alemania cayó a -14 en abril, muy por debajo del +9,3 esperado, aunque la producción industrial de la Eurozona superó las expectativas con un avance mensual del 1,1%. El euro se mantuvo firme frente al dólar, mientras que el rendimiento del bono alemán a 5 años se redujo a 2.06% desde el 2.44%.

En el Reino Unido, el mercado laboral ofrece señales contradictorias. Aunque el empleo remunerado cayó, el crecimiento salarial sigue sólido, situación que complica las decisiones del Banco de Inglaterra. A pesar de la debilidad laboral, la libra esterlina alcanzó máximos de seis meses frente al dólar. Por su parte, LVMH fue destronado por Hermès como la empresa de lujo más valiosa del mundo, luego de reportar ventas “por debajo incluso de las proyecciones más conservadoras” según Citi.

En Asia, China ha adoptado una postura diplomática agresiva frente a las tensiones arancelarias, ordenando la suspensión de entregas de aviones Boeing y elevando sus importaciones de crudo a 12.1 millones de barriles diarios en marzo, lo que ha contribuido a estabilizar los precios del petróleo junto con las exenciones arancelarias en EE.UU. y una menor previsión de demanda por parte de OPEP e IEA. Xi Jinping intensificó su gira diplomática por la región ASEAN, buscando reforzar alianzas ante lo que denominó “el unilateralismo de EE.UU.”.

Los precios del oro se mantuvieron firmes cerca de los $3.230 por onza, beneficiándose de la debilidad del dólar y el clima de aversión al riesgo, mientras que el Bitcoin se estabiliza sobre los $85.900 con proyecciones que lo ubican en $95.000 e incluso $137.000 según expertos que destacan la expansión global de la oferta monetaria. Ethereum y altcoins como PEPE, ALGO y JASMY muestran señales técnicas de consolidación positiva.

En Canadá, el índice de inflación se mantiene estable, mientras que el dato de inicios de viviendas cayó por debajo de lo esperado a 214.2 mil unidades. La situación refuerza la expectativa de una pausa en la política de relajación monetaria del Banco de Canadá. Por su parte, el dólar canadiense se mantiene bajo presión frente al dólar estadounidense, mientras que los productores de petróleo canadienses ven una ventana de oportunidad para acelerar proyectos en medio de la disputa arancelaria entre EE.UU. y China.

En el frente energético, la AIE recortó su previsión de crecimiento de demanda petrolera global para 2025 de 1.03 millones a 730 mil barriles diarios, en medio de un entorno fluido y de alto riesgo. Sin embargo, TotalEnergies proyecta un aumento del 4% en su producción para el primer trimestre y ha firmado un contrato de suministro de GNL con República Dominicana por 15 años.

En cuanto al comercio internacional, el Premier de China hizo un llamado a diversificar mercados y estabilizar el empleo, mientras Vietnam, Japón y Corea del Sur abren canales diplomáticos con EE.UU. buscando suspender o eliminar aranceles en sectores estratégicos. Japón reiteró su objetivo de eliminar todos los aranceles adicionales de EE.UU., mientras el yen mostró ligeras pérdidas frente al dólar, pero con sesgo alcista a mediano plazo.

En el plano tecnológico, los esfuerzos regulatorios se intensifican. El gobierno japonés emitió una orden de cese contra Google por prácticas anticompetitivas, mientras la UE reportó un endurecimiento en los estándares crediticios y caída en el ánimo inversor. En contraste, Ericsson se disparó un 7% al anticiparse a los aranceles en EE.UU., mientras Meta enfrenta nuevas críticas por prácticas monopólicas tras revelaciones del propio Mark Zuckerberg.

El panorama global presenta una peligrosa combinación de tensiones comerciales prolongadas, expectativas de inflación reactivadas, presión política y riesgos geopolíticos latentes. Los bancos estadounidenses muestran fortaleza operativa en el corto plazo, pero las advertencias sobre una posible recesión técnica o estancamiento con inflación no pueden ignorarse. Europa se encuentra atrapada entre la debilidad económica estructural y la necesidad de endurecer condiciones crediticias, mientras Asia se reorganiza para liderar nuevas coaliciones comerciales no occidentales.

De cara al segundo trimestre, los mercados enfrentarán una fuerte dependencia de los resultados empresariales, la evolución del conflicto arancelario, las decisiones de política monetaria en EE.UU., Europa y Canadá, y el comportamiento del petróleo y las criptomonedas como activos refugio. En este entorno, los inversionistas podrán priorizar activos de baja volatilidad, alta calidad y exposición limitada a riesgos regulatorios o geopolíticos, tal como recomiendan entidades como Charles Schwab. Las oportunidades se encuentran, pero exigen una lectura fina del nuevo mapa global de riesgos. La era postglobalización ha llegado, y con ella, la necesidad de estrategias más ágiles, diversificadas y resilientes.