- Sin embargo, cuatro de los seis sectores: textil, confecciones, metalmecánica y varios, no lograron superar sus montos máximos de años anteriores.
Los despachos manufactureros sumaron US$ 1,053 millones 111 mil entre enero y febrero del 2022, reflejando un crecimiento de 31.5% respecto al mismo lapso del año pasado (US$ 800 millones 675 mil) y superando por primera vez la barrera de los US$ 1000 millones en este periodo, informó la Gerencia de Manufacturas de la Asociación de Exportadores (ADEX).
A pesar de ese buen índice, la gerenta de Manufacturas del gremio, Melissa Vallebuona Peña, advirtió que 4 de ellos (textil, confecciones, metalmecánica y varios) no consiguieron superar sus montos máximos de años anteriores.
“Si bien la tendencia es positiva, el objetivo es superar las cifras históricas en cada sector cerrando el 2022 con nuevos récords. Confiamos que se pueda lograr, pues la actividad manufacturera involucra mano de obra especializada, especialmente en tecnología e innovación, generando muchos puestos de trabajo”, explicó.
Otro factor favorable –prosiguió– es la actual deslocalización, es decir, los compradores extranjeros buscan ahora proveedores más cercanos a sus zonas productivas, dejando de lado los países asiáticos, sobre todo por los sobrecostos generados por la crisis internacional y el conflicto entre Rusia y Ucrania.
En detalle
El rubro N° 1 por monto FOB el químico (US$ 332 millones 983 mil) con una evolución de 31.9% y concentrando el 31.6% del total. Sus partidas destacadas fueron el ácido sulfúrico, óxido de cinc, alcohol etílico sin desnaturalizar y las demás placas y láminas de polímeros de propileno, los cuales se dirigieron principalmente a Chile, EE.UU., Ecuador, Bolivia y Colombia.
La siderometalurgia (US$ 276 millones 178 mil) representó el 26.2% de los despachos industriales, presentando un alza de 36.8%. Entre sus primeros destinos figuran Colombia, EE.UU., Bolivia, Sudáfrica y Ecuador. Sus productos más solicitados fueron el cinc sin alear, alambre de cobre refinado, barras de hierro o acero sin alear, plata en bruto aleada, chapas y tiras de cobre refinado, y otros.
La oferta de prendas de vestir (US$ 204 millones 032 mil) cerró con una variación positiva de 33.5%, aunque no superó su mejor monto registrado en el 2008 (US$ 228 millones 171 mil). Su portafolio estuvo liderado por t-shirts de algodón y camisetas interiores de punto, los cuales se dirigieron mayoritariamente a EE.UU., que concentró el 72.8%.
Si bien la metalmecánica (US$ 90 millones 717 mil) aumentó sus pedidos en 23.1%, tampoco superó el monto del 2019 (US$ 95 millones 266 mil). Partidas como partes de máquinas o aparatos, máquinas de sondeo o perforación y tapones y tapas, entre otros, se despacharon a Chile, Ecuador, EE.UU., Bolivia y México.
Respecto al textil, estos envíos ascendieron a US$ 81 millones 525 mil –incremento de 28.7%–, pero tampoco alcanzaron su cifra del 2014 (US$ 93 millones 555 mil). Productos como el pelo fino o peinado de alpaca, tejidos de punto de algodón, hilados de lana y fibras acrílicas fueron demandados en su mayoría por EE.UU., Italia, Colombia, Chile y Ecuador.
Finalmente, el rubro ‘varios’ (industria del papel, joyería, orfebrería, artesanía, entre otros) llegó a los US$ 67 millones 674 mil y creció 19.8%. Sus principales mercados fueron EE.UU., Chile, Ecuador, Bolivia y Colombia. En enero-febrero del 2019 tuvo su mejor cifra (US$ 81 millones 434 mil).