El rechazo de un contenedor con productos no certificados puede elevar los costos logísticos hasta en US$ 40,000 por unidad. La puesta en operación del Puerto de Chancay abre espacios para crecer en la exportación de productos de calidad y certificados.
Las exportaciones peruanas batieron récord en 2024. Según estimaciones del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (MINCETUR) han alcanzado los US$ 74 000 millones, lo que supone un incremento de 15.8% respecto al monto registrado en 2023.
Sin embargo, la buena racha y constante avance de nuestra oferta exportable podría estar en riesgo si no se certifican la calidad de los productos, lo que podría acarrear rechazos de contenedores, generando pérdidas significativas a las empresas exportadoras.
De acuerdo con un informe del Banco Mundial, el rechazo de un contenedor puede elevar los costos logísticos hasta en US$ 40,000 por unidad. Estas pérdidas no solo afectan las finanzas de las empresas, sino que también dañan la reputación de los productos peruanos en el mercado internacional. Por ejemplo, en el 2018, se rechazaron 56 contenedores de uva de mesa peruana, por presencia del chanchito blanco, lo que afectó económicamente a las empresas involucradas.
“Para mitigar estos riesgos, es fundamental que las empresas exportadoras implementen rigurosos procesos de control de calidad y se adhieran a las regulaciones internacionales. En este contexto, las certificaciones de calidad, como las normas ISO, desempeñan un papel crucial al fortalecer la competitividad de una empresa y ser requisitos importantes para las exportaciones”, comentó Eduardo Martín Scerpella, CEO de Pacific Control CMA.
En ese sentido, un producto que cuenta con certificación tendrá mayores facilidades de acceso a los mercados internacionales, pues muchos países y bloques económicos, como la Unión Europea y Estados Unidos, tienen regulaciones estrictas sobre calidad, seguridad y sostenibilidad. “Sin certificaciones como ISO, HACCP, FDA o CE, los productos pueden ser rechazados en aduanas o enfrentar barreras comerciales”, reiteró Eduardo Martín Scerpella.
El experto añadió que cada mercado tiene requisitos específicos en materia de salud, seguridad y medio ambiente, por lo que cumplir con certificaciones garantiza que los productos sean aceptados y se eviten sanciones, multas o devoluciones de mercancía.
Luego de la puesta en operación del Puerto de Chancay y las inversiones en ampliaciones de los puertos del Callao, han dado las condiciones para seguir escalando en materia de exportación, sin embargo, la falta de certificación de calidad de productos podría afectar y restringir el aprovechamiento de su potencial, acotó el CEO de Pacific Control CMA.