Se estima que para el primer trimestre del 2025 el 50% de la demanda del gigante en lubricantes sea de producción peruana.
De acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la actividad de comercio al por mayor creció 2,43%, esto impulsado por la mayor venta de combustibles y lubricantes a los sectores minero, pesquero y de transporte aéreo, a los centros minoristas y a las distribuidoras de gas doméstico.
Este panorama positivo se verá reforzado con el relanzamiento de la cadena productiva en el país del lubricante Castrol, lo cual impactará de forma significativa en la economía local y en estos sectores clave.
En dicha producción, se incluirán lubricantes que destacan por sus tecnologías de última generación, diseñadas para evitar el desgaste, reducir la pérdida y reemplazo de piezas, y preservar el sistema mecánico de vehículos y maquinarias. Se estima que para el primer trimestre de 2025, el 50% de la demanda de lubricantes de Castrol en Perú sea abastecida localmente, generando un beneficio directo para los consumidores peruanos.
“Los productos para vehículos pesados como CRB Viscus se estarán produciendo en su totalidad (100% de forma local) y los destinados a vehículos ligeros se presentarán en formatos galones y botellas.” detalla Mario Olaechea, director de Sudamerica, Centroamerica y Caribe de Castrol. Este escenario, se traduce en una oportunidad significativa para la generación de empleo en Perú, fortaleciendo así la economía local. “Contar con una operación en el país impactará positivamente en la economía y nos permitirá contribuir de manera directa con entidades como el puerto de Chancay. Desde una óptica logística, al contar con insumos nacionales, se facilitará el mantenimiento y cuidado de embarcaciones, camiones y maquinaria pesada en toda la región”, afirmó Olaechea.
Por otro lado, resalta la solución para una problemática que el gigante en lubricantes arrastraba, y es una mayor seguridad contra la falsificación y la informalidad en el mercado de lubricantes, facilitada por un nuevo envase con tecnología avanzada. “El inicio de nuestra producción en Perú representa un avance en la lucha contra la falsificación y la informalidad en el mercado de lubricantes. Nuestra nueva presentación incorpora tecnologías de seguridad mejoradas, que protegen tanto a nuestros distribuidores como a los consumidores”, señaló Olaechea.
Además de un enfoque en la calidad y seguridad del producto, la empresa mantiene un compromiso firme con la sostenibilidad, pues ha establecido un plan que reduce significativamente el uso de plásticos en su cadena de producción, ahorrando en los últimos dos años más de mil toneladas.
Por otra parte, ha iniciado un proyecto con Estados Unidos para incorporar materia prima reciclada en sus productos. “Este acuerdo, aún está en una fase de planeación , ya que necesitamos complementarlo con una serie de herramientas, como tecnología y educación, los que será fundamental para una correcta introducción a la cartera de productos.”- enfatiza Olaechea. (quizás valdría la pena omitir esta parte y anunciarlo más adelante cuando ya esté listo el proyecto)
De esta manera, Castrol busca convertir a Perú en un centro estratégico de producción de lubricantes en la región, aportando al desarrollo de una economía más sólida y sostenible y así reafirmar su visión de liderar el mercado de lubricantes en América Latina,