La puerta a una nueva revolución tecnológica ha sido abierta y está obligando a la sociedad a reformular la forma en la que aprende y se relaciona con los demás. Es por eso que Melina Masnatta, emprendedora tecnológica que participará en CADE Educación 2023 durante la sesión de Inteligencia Artificial en la educación, explica los principales retos que enfrentan los docentes y estudiantes en el Perú.
- Reformular la evaluación
La evaluación que apunte a una estandarización del conocimiento se va a ver impactada con la IA, y esto desafía al sistema de acreditación tradicional de la educación. Es necesario recuperar el sentido de la evaluación desde un enfoque personalizado, donde los estudiantes puedan dar cuenta de una apropiación del conocimiento a través de una producción original. “A su vez la aplicabilidad cobra relevancia, se propone generar formas de evaluar que puedan dar cuenta del uso y sentido en un contexto determinado. En la actualidad, las AI no entienden el contexto de aplicación. Se deben generar comités activos de la comunidad educativa para poder generar las nuevas reglas del juego en la evaluación” menciona Masnatta.
- Limitaciones en las respuestas
Aunque la IA puede proporcionar respuestas rápidas, es fundamental que los estudiantes también desarrollen habilidades de pensamiento crítico para evaluar, cuestionar y analizar la información que reciben, sobre todo las fuentes. No solo porque la información tiene limitaciones, especialmente en lo que respecta a aplicabilidad es decir en el para qué se precisa esa información, sino porque el depender de la tecnología para todo el proceso, podría provocar que se pierdan otras cualidades, como la capacidad reflexividad, la tolerancia a la frustración por no encontrar un dato por ejemplo y/o la resiliencia en esa búsqueda. Debe ser tan solo un recurso más.
- Falta de acceso a la conectividad
El internet y las telecomunicaciones son servicios fundamentales para aprovechar las bondades de la Inteligencia Artificial; sin embargo, aún existe una brecha digital importante marcada entre las zonas urbanas y las zonas rurales. Según el INEI, en el cuarto trimestre del 2022 solo un 58.4% de los hogares peruanos tenía acceso a internet. En palabras de Masnatta, se deben “generar las condiciones para que todas las escuelas partan del mismo lugar”.
- Cambiar paradigmas
En el mundo educativo formal es común priorizar los conocimientos teóricos. No obstante, la experta destaca que, en el ámbito tecnológico, la experimentación es fundamental para un aprendizaje efectivo, en este sentido es necesario generar un diálogo que promueva un rediseño de las propuestas de enseñanza con lo mejor de los mundos. Programas de IA como ChatGPT se mantienen en constante actualización, lo que resalta la necesidad de estar en un aprendizaje continuo para mantenerse actualizado, así como también enfatizar en poder rediseñar qué y cómo la educación es diferencial a lo que puede aportar una tecnología.
- Detectar plagio
Los sistemas de IA, como los modelos de lenguaje, pueden producir texto automáticamente. Esto facilita que los estudiantes copien y peguen el contenido sin citar adecuadamente las fuentes o atribuir el trabajo original. Si bien hay programas que apuntan a detectar el plagio, existe el desafío de que aparezcan nuevas formas de hackear la tecnología. “Es difícil de prohibirla. Emplear detectores de contenido es tapar el sol con la mano. Lo que sí hay que hacer es generar preguntas que no sean resueltas por la IA”, sostiene.
CADE Educación 2023, el foro educativo más importante del país, brindará un espacio de reflexión y debate sobre estos desafíos y cómo la IA puede ser aprovechada de manera ética y eficiente en el contexto educativo peruano. La participación de expertos como Melina Masnatta proporcionará una visión valiosa para orientar el camino hacia una educación más innovadora y adaptada al entorno tecnológico actual.