Por María Méndez, presidenta y fundadora de Vacation is a Human Right (VIAHR).
Los altos niveles de agotamiento laboral en nuestro entorno están generando una mayor preocupación. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 27% de los trabajadores experimenta altos niveles de estrés laboral, lo cual incide en el desarrollo del síndrome del burnout. Lo bueno es que estamos tomando más en serio el llamado a la acción.
La conciliación entre la vida laboral, personal y familiar es un reto que todos enfrentamos. Sabemos que, muchas veces, las demandas del trabajo pueden parecer abrumadoras. Por eso, el tema es motivo de análisis permanente en el Congreso Iberoamericano para Prevenir el Burnout, que en otoño se celebrará en Cartagena de Indias, Colombia.
Estas son algunas ideas para cuidar el bienestar:
- Flexibilidad laboral: la vida es impredecible, y también necesitamos tiempo para nosotros o nuestras familias. Ofrecer flexibilidad, ya sea en horarios o en la opción de trabajar desde casa, puede marcar una gran diferencia. Estas políticas contribuyen a una mejor conciliación de las vidas de los colaboradores, incluso a mayor identificación con la organización. Evidencian que la empresa no solo toma en cuenta la productividad, sino que facilita que las personas gestionen su tiempo de una manera en la que se sientan plenas en todas las áreas de vida.
- Desconexión digital: es fácil quedar atrapados en la vorágine de correos y mensajes fuera de horas de trabajo. Sin embargo, desconectar es un acto de autocuidado. Dejar de lado el teléfono y estar presentes en nuestra vida personal, nos ayuda a recargar energías y nos permite dar lo mejor en todas nuestras responsabilidades. La profesora Sandra Sieber comparte sugerencias para promover la calma digital. Aplicar pequeños cambios en los hábitos puede tener un impacto crucial: asignar un tiempo específico de acceso al email; organizar las aplicaciones y borrar las que no se usen; decidir cuándo conectarse y cuándo no; permitir que los equipos también desconecten fuera del horario laboral, entre otros.
- Planes de bienestar: queremos que todos se sientan cuidados, física y emocionalmente. No siempre es fácil cuidar de nosotros mismos cuando hay tantas responsabilidades. Es importante ofrecer herramientas que nos ayuden a estar bien, desde el acceso a clases de yoga o programas de salud mental, hasta espacios seguros para hablar y compartir. Considerando lo indicado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), es preciso que trabajadores y empresas aseguren tiempo suficiente para periodos de descanso y actividades de tiempo libre. La vida social, las actividades de ocio y el relax son factores que también impactan nuestro bienestar.
- Cargas laborales justas: todos queremos dar lo mejor, pero a veces sentimos que llevamos demasiado peso. Es importante que podamos distribuir el trabajo de una manera justa y realista, para que nadie se sienta abrumado o agotado. Así, todos podemos contribuir desde nuestro mejor lugar a generar bienestar, actuando se manera coherente para contribuir con el Objetivo de Desarrollo Sostenible N.º 8: Trabajo decente y crecimiento económico.