Compradores peruanos combinan herramientas digitales, visitas presenciales y recomendaciones para tomar decisiones informadas. Análisis fue realizado a propietarios que llevan 6 meses de permanencia en sus viviendas.
Los hábitos de los peruanos para buscar vivienda han evolucionado considerablemente en los últimos años, marcados por la integración de herramientas digitales, la importancia de evaluar personalmente las ubicaciones y la confianza en las recomendaciones cercanas. Según el más reciente estudio de Best Place to Live®, los tres principales canales elegidos por los compradores son: la publicidad online, la búsqueda espontánea y la recomendación directa.
Con el 22,4% de las preferencias, los canales digitales, como redes sociales y portales inmobiliarios, son el punto de partida más común en la búsqueda de vivienda. Estos medios permiten a los compradores acceder fácilmente a información detallada, fotos, recorridos virtuales y experiencias visuales desde cualquier lugar.
“Hoy, la búsqueda de vivienda comienza en internet. Las personas valoran la posibilidad de explorar múltiples opciones y evaluar características sin moverse de sus casas. Sin embargo, esto también implica que las inmobiliarias deben esforzarse en crear contenido atractivo y relevante que logre captar la atención de un público cada vez más informado” explica Cinthia Pasache, Gerente Comercial de Best Place to Live®.
A pesar de la fuerza de los canales digitales, la búsqueda espontánea al “pasar por el lugar” sigue siendo fundamental, representando el 19,3% de las menciones. Este comportamiento subraya la importancia de la visibilidad física de los proyectos, ya que muchos compradores desean evaluar el entorno y los detalles presenciales antes de considerar una opción.
Uno de los hallazgos más relevantes de este análisis es el impacto de la recomendación de amigos y familiares, que ocupa el tercer lugar con un 15,4%. “La confianza que genera una recomendación personal tiene un efecto directo en el bajo costo de adquisición de clientes para las inmobiliarias, así como en la alta tasa de conversión. Un cliente satisfecho no solo tiene mayores probabilidades de recomendar la marca, sino que también se convierte en un embajador que refuerza la credibilidad de una inmobiliaria”, destaca Pasache.
El peruano es un comprador que combina medios y experiencias, ya que no se limita a un solo canal para buscar vivienda, sino que suele combinar diferentes fuentes para tomar decisiones informadas. Por ejemplo, muchos inician su búsqueda en plataformas digitales para explorar opciones, visitan físicamente los proyectos que más les interesan para evaluar su ubicación, y finalmente, recurren a opiniones de conocidos para validar su decisión.
Esta diversidad de enfoques obliga a las inmobiliarias a estar presentes en diferentes puntos de contacto, desde campañas en redes sociales y portales hasta la experiencia presencial en las ubicaciones. Como señala Pasache, “para tener éxito en un mercado tan dinámico, las inmobiliarias deben encontrar un balance entre lo digital y lo presencial. Esto no solo mejora la experiencia del cliente, sino que también les permite estar disponibles en los momentos clave de la decisión de compra.”
El estudio de Best Place to Live no solo ofrece una radiografía de los medios más utilizados por los compradores, sino que también evidencia cómo las nuevas tendencias tecnológicas y sociales están redefiniendo el sector inmobiliario en el Perú.