Por: César Fernandini, socio de la Cámara de Comercio Chilca-Pucusana.
Hoy en día ha cobrado mayor importancia que las empresas dentro de sus protocolos internos tengan objetivos para reducir el impacto que causan al instalarse en una ciudad, incorporando políticas de procesos industriales sostenibles que ayuden a mitigar la contaminación del agua, la tierra y el aire. Este proceso sostenible debe ser aplicado desde la transformación de las materias primas hasta la obtención del producto, así como reducir al mínimo los residuos y reciclar los desechos en la medida de lo posible.
En ese sentido, las compañías además de plantear estrategias para lograr el éxito económico, deben tener el gran propósito de ser sustentables y amigables con el medio ambiente. Implementar estas políticas les ayudará a estar vigentes durante un largo tiempo y ser percibidas como empresas responsables que se preocupan por el bien común y que contribuyen al desarrollo sostenible del lugar donde realizan sus actividades.
Para lograr mejores resultados y un crecimiento que perdure en el tiempo, las industrias pueden utilizar fuentes de energía eléctrica renovables no contaminantes como la hidráulica, solar o eólica. También reducir el consumo de combustibles fósiles y evitar el uso de todo material no degradable para el empaque de productos.
Asimismo, las compañías debemos invertir en la reutilización de residuos, aguas industriales y municipales que sirvan para el aprovechamiento de la población y medio ambiente; tener iniciativas que vayan más allá de lo que la ley nos exige para lograr un crecimiento ordenado y en armonía con la comunidad que nos acoge.
En tanto, es fundamental que el estado promueva un rol de reducción del impacto ambiental en los procesos productivos de las industrias, incentivando mediante disminuciones tributarias las buenas prácticas medioambientales.
Como miembros de la Cámara de Comercio Chilca – Pucusana, tenemos la visión de convertir a estos distritos en una “zona verde”, donde se fomente la inversión responsable con actividades que incorporen procesos sostenibles y amigables con el medio ambiente. Las compañías que tenemos operaciones en esta zona respetamos estrictamente las normas nacionales e internacionales para el cuidado del planeta.
Por ejemplo, contamos con una planta de tratamiento de aguas residuales industriales y una planta de tratamiento de aguas municipales residuales para el regado de áreas verdes.
Es importante que las empresas sigan procesos industriales sostenibles, teniendo en cuenta también que en el lugar se produce el 45% de la energía del país. Además, se tiene proyectado la construcción de un terminal portuario multipropósito, proyectos de vivienda, entre otros, dado el gran potencial que tienen para lograr ser la ciudad industrial más moderna del Perú.