La construcción del Megapuerto de Chancay despierta inquietud en Chile y promete transformar el comercio marítimo en el Pacífico.
El Megapuerto de Chancay ha captado la atención internacional por su capacidad para mejorar la conexión entre América Latina y Asia, ofreciendo una ruta marítima más eficiente. Este desarrollo ha generado preocupación en Chile, uno de los principales actores logísticos de la región.
Felipe Larraín, exministro de Hacienda de Chile, reconoció que el puerto peruano representa un reto para la competitividad de su país. “Nosotros miramos con mucho interés en Chile lo que ustedes hicieron. Ciertamente, el Puerto de Chancay les da una herramienta competitiva. De alguna manera, esto nos remece para andar un poco más rápido”, declaró Larraín en entrevista con El Comercio.
A pesar de que las economías latinoamericanas han mostrado crecimiento, Larraín advirtió que la región aún enfrenta desafíos para alcanzar la competitividad global. Señaló que el Megapuerto de Chancay podría convertirse en un punto estratégico no solo para Perú, sino para toda América Latina, facilitando el comercio de productos desde distintos países hacia Asia.
Proyecciones económicas alentadoras
Un informe de Credicorp Capital destaca que el Megapuerto de Chancay podría influir en las expectativas económicas a mediano y largo plazo. La estabilidad del sol peruano durante 2024, con una depreciación del 1,3%, demuestra la fortaleza económica del país, respaldada por un superávit comercial récord y términos de intercambio favorables.
Carlos Tejada, gerente general adjunto de Cosco Shipping, subrayó que Chancay ofrece rutas directas a Asia, lo que representa una ventaja significativa frente a los puertos chilenos. Esta conexión más rápida podría reducir los tiempos de transporte en hasta 12 días.
Mientras Chile anuncia una expansión de su puerto San Antonio con una inversión de US$4.000 millones, Tejada enfatizó que Chancay tiene el potencial de convertirse en un hub regional, integrando las cargas del Pacífico y facilitando el acceso a los mercados asiáticos.
El Megapuerto de Chancay, con su ubicación estratégica y conexiones directas, podría redefinir el comercio marítimo en el Pacífico, fortaleciendo la posición de Perú en el comercio internacional y desafiando a sus vecinos del sur.