Oportunidades de inversión: Principales diferencias entre los activos tradicionales y alternativos

Los activos alternativos pueden ser atractivos por su potencial de altos rendimientos y la diversificación que ofrecen.

El dinamismo que ha presentado el mercado de las finanzas en el mundo también se ve replicado en el país, y es que en la actualidad los inversionistas peruanos se encuentran frente a una amplia gama de opciones que van más allá de los activos tradicionales como acciones y bonos. Los activos alternativos, que incluyen bienes raíces, capital privado y hasta criptomonedas están ganando terreno como alternativas viables para quienes buscan diversificar sus portafolios y encontrar nuevas oportunidades de crecimiento.

“Es importante destacar que la elección entre estos activos dependerá de los objetivos de inversión, la tolerancia al riesgo y la necesidad de liquidez. Por ejemplo, los activos alternativos que actualmente están teniendo mayor acogida en la diversificación por su rentabilidad, implica que te asesores con empresas especializadas y con amplia experiencia que te ayuden a minimizar el riesgo, y manejar adecuadamente cada detalle de las operaciones y estrategia de inversión”, explica Freddy Salcedo, director ejecutivo de Conexa Financial Group.

En ese sentido, el especialista detalla cuáles son las principales diferencias que se pueden encontrar en ambos tipos de activos, con la finalidad de hacer una evaluación apropiada:

Liquidez:

  • Activo tradicional: Generalmente son más líquidos, es decir, se pueden comprar y vender fácilmente en mercados abiertos. Por ejemplo, las acciones y bonos se negocian en bolsas de valores con alta frecuencia.
  • Activo alternativo: Son inversiones a largo plazo. Vender una propiedad inmobiliaria o una participación en un fondo de capital privado puede llevar tiempo, pero también te permite evaluar el mejor momento para maximizar el retorno y encontrar el comprador más adecuado.

Riesgo y retorno:

  • Activos Tradicionales: Suelen tener perfiles de riesgo y retorno más predecibles, con una mayor disponibilidad de datos históricos y análisis. Los retornos están más correlacionados con el desempeño general del mercado.
  • Activos Alternativos: Ofrecen potenciales retornos más altos, que en algunos casos pueden ser más riesgosos. Lo ideal es realizar este tipo de inversiones con empresas que puedan minimizar este riesgo y ampliar tu rentabilidad.

Accesibilidad:

  1. Activos Tradicionales: Son más accesibles para el inversionista promedio. Las acciones, bonos y fondos mutuos están disponibles para la mayoría de las personas a través de plataformas de corretaje convencionales.
  2. Activos Alternativos: Suelen estar reservados para inversionistas acreditados o institucionales debido a las altas barreras de entrada, como requisitos de capital elevados y una mayor complejidad en la inversión.

Evaluación y transparencia:

  1. Activos Tradicionales: La valoración es más transparente y basada en el mercado. Los precios de las acciones, bonos y otros instrumentos financieros se actualizan en tiempo real en los mercados públicos.
  2. Activos Alternativos: La valoración es más flexible y personalizada, permitiendo que factores únicos y específicos, como el valor cultural de una obra de arte o las características particulares de una propiedad inmobiliaria, influyan en su valoración. Esta flexibilidad puede ofrecer oportunidades para encontrar valor en aspectos que no siempre se reflejan en los mercados públicos.

Regulación:

  • Activos Tradicionales: Están más regulados y supervisados por entidades gubernamentales, como la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV), la SBS y la Bolsa de Valores de Lima..
  • Activos Alternativos: Están menos regulados, lo que puede ofrecer más flexibilidad.

“No se puede decir que uno sea mejor que el otro de manera absoluta. Para algunos inversionistas, los activos tradicionales pueden ser más adecuados debido a su estabilidad, liquidez y facilidad de acceso. Para otros, los activos alternativos pueden ser atractivos por su potencial de altos rendimientos y la diversificación que ofrecen, siempre acompañados de empresas especializadas para asesorar este tipo de inversiones. Vale recalcar que también se puede optar por una combinación de ambos tipos de activos para equilibrar riesgo y retorno en sus carteras”, finaliza Salcedo.