Las regulaciones están evolucionando para incluir el uso de tecnologías avanzadas como la inteligencia artificial y el blockchain.
El panorama regulatorio tecnológico en Perú para el año 2025 está marcado por un enfoque en la inteligencia artificial (IA), la privacidad de datos biométricos y el cumplimiento tributario. Estas áreas reflejan tanto tendencias globales como las necesidades específicas del contexto peruano, donde la adopción de tecnologías avanzadas está transformando los sectores económico y social.
Andrés Landerretche, Director de Análisis Regulatorio en Sovos, explica los aspectos más relevantes y los avances regulatorios en estas tres áreas clave.
Inteligencia Artificial
El Perú se encuentra en las primeras etapas de establecer un marco regulatorio para la inteligencia artificial. La Estrategia Nacional de IA tiene como objetivo promover la innovación y asegurar una adopción ética de esta tecnología. Entre sus prioridades destacan la construcción de infraestructura digital para desarrollar sistemas tecnológicos que soporten aplicaciones de IA a gran escala, y la capacitación en IA para formar a profesionales en herramientas y metodologías avanzadas de inteligencia artificial.
En general, se están alineando los esfuerzos regulatorios con los estándares globales, centrándose en fomentar la innovación mientras se abordan las preocupaciones éticas y de privacidad. Es probable que esta tendencia se fortalezca a medida que la inteligencia artificial continúe desempeñando un papel crucial en el desarrollo económico y social.
Las regulaciones están evolucionando para incluir el uso de tecnologías avanzadas como la inteligencia artificial y el blockchain, que pueden mejorar la seguridad y la eficiencia de los servicios de confianza -soluciones tecnológicas diseñadas para garantizar la seguridad, autenticidad y privacidad de las transacciones y comunicaciones digitales- como biometría, certificados digitales, firmas electrónicas y autenticación multifactor.
Además, la IA está transformando la facturación electrónica al mejorar la eficiencia, precisión y seguridad de los procesos. Utilizando Procesamiento del Lenguaje Natural (NLP) y Reconocimiento Óptico de Caracteres (OCR), la inteligencia artificial extrae automáticamente información clave de las facturas, eliminando la necesidad de entrada manual de datos y reduciendo errores. También automatiza la creación y envío de comprobantes, valida datos, detecta fraudes mediante el análisis de patrones, integra los sistemas de facturación con plataformas empresariales como ERP y CRM, y genera informes detallados y análisis predictivos para mejorar la gestión financiera y las estrategias de cobro.
«La adopción de la inteligencia artificial en la facturación electrónica no solo mejora la eficiencia operativa, también fortalece la transparencia y la integridad en los procesos fiscales. Es fundamental que las empresas se adapten a estas tecnologías para mantenerse competitivas y cumplan con las regulaciones vigentes”, comenta Landerretche.
Datos Biométricos y Servicios de Confianza
Para garantizar el correcto manejo de los datos biométricos, las organizaciones deben cumplir con lineamientos normativos esenciales que prioricen la protección y seguridad de la información. Esto comienza con el consentimiento informado, asegurando que los usuarios comprendan y aprueben explícitamente el uso de sus datos. Además, es fundamental definir un propósito claro para el tratamiento de datos, almacenarlos en entornos seguros utilizando estándares internacionales como ISO 27001 y establecer límites específicos para el tiempo de retención.
La implementación de auditorías regulares ayuda a identificar posibles brechas y prevenir sanciones, mientras que la capacitación continua del personal asegura el cumplimiento de normativas locales e internacionales. Estas medidas fortalecen la confianza de los usuarios y minimizan riesgos operativos.
En los últimos años, las regulaciones en el ámbito de los servicios de confianza, a nivel global, han evolucionado significativamente para adaptarse a los avances tecnológicos y las crecientes necesidades de seguridad digital. Algunas de las principales tendencias son:
- El Reglamento eIDAS (Electronic Identification, Authentication and Trust Services) en Europa ha sido fundamental, ya que establece un marco para la identificación electrónica y los servicios de confianza, garantizando la interoperabilidad y la seguridad en las transacciones digitales a nivel europeo.
- La actualización del Reglamento sobre la Identidad Digital Europea, que a partir de mayo de 2024 introdujo nuevas medidas para mejorar la seguridad y la confianza en los servicios digitales.
- El aumento del escrutinio regulatorio a nivel global, especialmente en sectores como el financiero y el fintech, donde se están implementando normas más estrictas para prevenir la criptodelincuencia y asegurar el cumplimiento de las leyes de protección de datos.
- La interoperabilidad global, que está trabajando para que las regulaciones sean más armonizadas a nivel internacional, facilita la operabilidad entre diferentes sistemas y países. Esto es crucial para el comercio global y las transacciones transfronterizas.
- Las leyes de protección de datos y privacidad, como el GDPR en Europa, están influyendo fuertemente en cómo se diseñan y operan los servicios de confianza, asegurando que la privacidad de los usuarios sea una prioridad.
“Las regulaciones están poniendo más énfasis en la resiliencia y la continuidad de los negocios, asegurando que los servicios de confianza puedan operar de manera segura y continua incluso en situaciones de crisis”, explica el experto de Sovos.
Cumplimiento tributario
El cumplimiento tributario es una pieza clave en el ecosistema regulatorio peruano, especialmente con el avance de la digitalización y la globalización de los negocios. El Estado ha implementado leyes con el objetivo de mejorar la transparencia y eficiencia en la recaudación de impuestos, así como reducir la evasión fiscal. Además, se han establecido mecanismos para la interoperabilidad de los sistemas de gestión tributaria con plataformas digitales del gobierno y ofrecido incentivos a las empresas que adoptan la facturación electrónica, como deducciones fiscales y reducción de multas por cumplimiento temprano.
“En 2025, el Perú está avanzando hacia un entorno regulatorio tecnológico más maduro y alineado con las tendencias globales. La adopción de inteligencia artificial, la protección de datos biométricos y la digitalización tributaria no solo buscan modernizar los procesos, sino también garantizar una economía más segura y eficiente. Estas medidas serán cruciales para impulsar el desarrollo económico y social del país”, concluye el Director de Análisis Regulatorio en Sovos.