- El empleo de tecnologías de medición y detección de fugas reducen pérdidas en la cadena de producción y distribución de gas
- Los sensores de Picarro son capaces de detectar fugas de metano a distancias de hasta 200 metros
Actualmente la industria mundial el gas natural enfrenta enormes desafíos, conformados por un contexto integrado no solo por el marco regulatorio vigente, sino también por que enfrenta el reto mayúsculo de ser un energético eficiente pero también con un compromiso ambiental de reducir las emisiones de metano que produce.
Dentro de este contexto, Picarro como empresa de soluciones para medición de concentraciones de gases de efecto invernadero (GEI) destaca que ante la situación actual que muchas ciudades enfrentan con referente a tener grandes concentraciones de GEI es importante que tanto empresas como la industria en general adopten medidas específicas para reducir las emisiones de, por ejemplo, gas metano a la atmósfera, debido a que este posee 80 veces más poder que el dióxido de carbono (CO2) para calentar el planeta en un periodo de 20 años. Picarro logra este cometido a través de tecnologías innovadoras que contribuyan al respecto para la gestión ambiental con sostenibilidad económica.
De acuerdo con los especialistas de Picarro es importante destacar que con respecto al segmento de gas natural, compuesto por, alrededor de 90% de metano, actualmente encontramos que durante todo el proceso que comprende la cadena de producción de dicho energético, la cual va desde su procesamiento, transmisión, almacenamiento y distribución, se generan constantemente emisiones en prácticamente todas estas etapas las cuales deben estar vigiladas, monitoreadas y localizadas, motivo por el cual la detección, medición y reparación de estas fugas se constituye como un factor clave para mitigar significativamente las emisiones de gas metano a la atmósfera.
Malvin Delgado director, Sales & Client Engagement Latin America destaca: “Si bien es cierto que actualmente existe un marco regulatorio vigente para esta industria, es importante que más allá del mismo las empresas comiencen a adoptar una visión más amplia acerca de la responsabilidad ambiental que tienen con su entorno. En Picarro estamos convencidos de que en la medida que las empresas inviertan en tecnologías de detección y medición de fugas serán no solo más responsables con el medio ambiente, sino que también estarán contribuyendo a un futuro más sostenible”
Las fugas de gas natural no solo son un punto de impacto ambiental sino también tienen un contexto financiero que impacta directamente en la economía de las empresas ya que al tener varias de ellas, sin importar su tamaño, esto puede traducirse en importantes pérdidas económicas.
De acuerdo con datos de los especialistas de Picarro se estima que actualmente las empresas de producción de gas natural que no cuenten con soluciones de detección avanzada de fugas pueden estar experimentando pérdidas de productividad en más del 20% mensual y por lo tanto una reducción en sus utilidades significativa, esto incluiría costos asociados con seguridad, medio ambiente, pérdidas o mermas en de gas, costos de mantenimiento y costos relacionados con servicio al cliente.
De acuerdo con Picarro como empresa especializada en soluciones de detección de fugas y cuantificación de emisiones de metano, actualmente la industria del gas natural en nuestro país requiere centrar sus estrategias y enfoque, tanto de producción y operación en una visión más rentable, eficiente y precisa que le permita garantizar la reducción de emisiones de metano.
Ante este contexto la llegada de nuevas tecnologías de Detección Avanzada de Fugas Móviles (AMLD) están jugando hoy en día un papel determinante en la sustentabilidad de las empresas, así como en la conservación del medio ambiente ya que, a través del uso de sensores montados en vehículos especialmente adaptados, así como drones, ahora es posible detectar fugas en tiempo real que son reportadas en tiempo real a las empresas permitiéndoles así ser más precisos en la toma de decisiones.
El empleo de dicha tecnología está cambiando la forma en como las empresas son mas responsables con el medio ambiente ya que gracias a la Detección Avanzada de Fugas Móviles de Picarro, ahora es posible ubicar de manera remota los puntos de fugas a lo largo de la ciudad, ya sea que estos provengan de tuberías, infraestructura o algún otro lugar.
En cuanto el sistema detecta alguna fuga importante la reporta a través de dispositivos móviles que suben la información a la nube y permiten así la puesta en marcha de acciones inmediatas, más específicas, tanto para la prevención y corrección de desperfectos en las instalaciones de gas natural.
Actualmente los sensores móviles que emplea Picarro son capaces de detectar fugas de metano a distancias de hasta 200 metros, cubriendo un área más amplia e identificando fugas de difícil acceso. Esta tecnología está siendo un jugador clave en toda la cadena de generación y distribución de gas natural con la que ahora también es posible reducir costos operativos.