¿POR QUÉ ES NECESARIA UNA BUENA GESTIÓN ADMINISTRATIVA EN PYMES?

  • La ejecución de una gestión administrativa es fundamental para el éxito de una empresa, sea grande o pequeña. Sin embargo, es una de las áreas menos trabajadas en las PYMEs.

Este mes se celebra el Día del Administrador Peruano, que destaca el rol importante de esta profesión en la toma de decisiones y realizar acciones estratégicas para alcanzar metas organizacionales. Su labor es vital en todo tipo de empresas, y más aún, en los pequeños/medianos negocios, que atraviesan una serie de desafíos como la falta de capacitación, la informalidad y, actualmente, los estragos del conflicto político.

Ana Choquehuanca, la presidenta de la Asociación de Gremios de la Pequeña Empresa (Pyme Perú), afirmó que dos millones de empresas del sector están en riesgo de quebrar a raíz de la conflictividad. Algunos negocios contemplan el cambio de rubro o, en el peor de los casos, optar por la informalidad, como método de supervivencia.

Ante este panorama desfavorable, es importante implementar una gestión administrativa que, a través de estrategias contingentes, prepare a las microempresas, que representan una parte vital de la fuerza económica en el país. Sin la administración, no se puede definir objetivos claros y desafiantes, que permitan orientar al equipo en una sola dirección y soslayar tiempos turbulentos.

Luis Fernando Boza, Chair de Vistage Perú, manifiesta que muchas PYMEs inician sin aplicar una correcta gestión administrativa, generando dificultades para crecer y enfrentar la competitividad del mercado o situaciones de crisis: “Llevar a cabo una gestión administrativa ayuda a tomar mejores decisiones, así como a adaptarse a los desafiantes cambios del mercado. Nos permite identificar oportunidades, definir mejores estrategias, evaluar el trabajo del equipo en relación con los objetivos estratégicos planteados y tomar las acciones correctivas a tiempo”.

Solución al empirismo

Los emprendedores empíricos crean y dirigen un negocio con mucha intuición, perseverancia y autonomía, en muchos casos, creen ser mejores que sus colaboradores para ejecutar las tareas más complejas como lo han aprendido basados exclusivamente en su experiencia.

Por otro lado, los emprendedores profesionales tienen una formación académica y conocimientos especializados en áreas como la administración, finanzas o marketing. La formación académica siempre será de gran utilidad para los pequeños empresarios, les ayudará a desarrollar una visión estratégica y a planificar el crecimiento sostenible de su empresa de manera exitosa.

El experto recomienda que, el intercambio de experiencias y la revisión de conceptos participando en foros de empresarios, es de gran utilidad para los empresarios PYMEs, tanto empíricos como profesionales de formación. “Los emprendedores sufren de aislamiento en la toma de decisiones para sus empresas, por más conocimientos que tengan, siempre es conveniente contrastar puntos de vista con otros empresarios de igual o mejor formación y experiencia”, afirmó.

Por ello, una empresa requiere una gestión de administración, lo cual se subestima en muchas ocasiones. Aunque el empresario se ocupa de su propio negocio, no lo administra verdaderamente. Puede conocer y saber cómo funcionan las ventas, pero, no aplica un análisis de mercado, no define la tasa de rendimiento mínimo, reclutar al personal adecuado, entre otros.

En un entorno de inestabilidad, el empirismo administrativo lleva a los microempresarios a tomar decisiones inapropiadas basadas en el sentido común y muchas están condenadas al fracaso por la falta de reflejos y ausencia de planes estratégicos. En efecto, Boza nos da 5 consejos de gestión y administración de PYMES en situaciones de crisis:

  1. Aplicar una gestión administrativa de calidad, que ayude a planificar, organizar, dirigir y controlar un plan de negocios estratégico.
  2. Contar con las personas correctas en cada posición crítica del negocio y delegar las decisiones que se toman día a día, según sus capacidades.
  3. Fomentar la cultura de la innovación y la búsqueda de la competitividad, más en entornos inciertos, que brindan nuevas oportunidades y formas de gestionar el negocio.
  4. Mantener una planificación financiera, con un plan sólido y actualizado para poder hacer frente a la incertidumbre económica, asegurando la viabilidad y estabilidad de la empresa a largo plazo.
  5. Contar con un grupo de apoyo empresarial que nos permita compartir experiencias y aprendizajes con otros empresarios exitosos. Ser flexibles y adaptables, escuchando y observando las iniciativas de otros emprendimientos/experiencias similares.