Por Danitza Salas, Directora de Minería en ManpowerGroup.
En la industria minera podemos encontrar las oportunidades de desarrollo y crecimiento para el país, así como también para las comunidades, proveedores, asociaciones, familias, entre otros. En el tema profesional, este sector representa también un atractivo relevante para miles de mujeres y hombres jóvenes que compiten por un rol laboral en alguna de las compañías dedicadas a este negocio.
¿Por qué la minería significa una plaza competitiva para los profesionales? Pues basta con remitirnos a los indicadores de esta actividad en el Perú. Según el último informe Avance Coyuntural de la Actividad Económica del INEI, en julio de 2023, la producción del sector Minería e Hidrocarburos creció en 11,38% en comparación con el mismo periodo del 2022. Ya en ese año la Sociedad Nacional de Industrias reportaba que las inversiones mineras superaban los 2 mil 700 millones de dólares y creaban más de 245 mil empleos directos a nivel nacional.
Enfocándonos en esa oferta de puestos de trabajo en el sector minería, es importante considerar los perfiles que buscan alguna vacante en las distintas compañías. Hoy, las posiciones más solicitadas son Ingenieros de Minas, Geólogos de Exploración, Ingenieros Metalúrgicos, Ingenieros de Planta, Especialistas en Seguridad Minera y Expertos en Gestión Ambiental y Relaciones Comunitarias. Estos roles son esenciales en diferentes etapas del proceso minero, abarcando desde la exploración y extracción, hasta el procesamiento del mineral y la gestión integral de la seguridad considerando el entorno.
En el ámbito técnico, la demanda de talento también es específica y varía según las necesidades de cada proyecto y compañía minera. Entre las posiciones técnicas más buscadas destacan los Técnicos en Operaciones Mineras, Técnicos en Metalurgia, Técnicos en Seguridad Minera y Técnicos en Mantenimiento de Equipos, entre otros.
Frente a la relevancia y el valor que estas posiciones aportan al desarrollo y sostenibilidad del sector, ocurre también la paradoja de la escasez de talento. Es decir, ante la oferta atractiva de vacantes, las empresas no encuentran al candidato o candidata adecuados. Por ejemplo, según el último reporte de Escasez de Talento de ManpowerGroup, el 70% de empleadores a nivel nacional manifiesta tener dificultades para hallar al profesional que cumpla con los requerimientos técnicos y blandos para los puestos vacantes.
A ello se suma la tendencia creciente hacia la adopción de tecnologías sostenibles, lo que ha amplificado la demanda de perfiles especializados en tecnología y minería, con las competencias necesarias para implementar soluciones tecnológicas que no solo optimicen las operaciones y reduzcan costos, sino que también promuevan la gestión responsable del medio ambiente. Asimismo, la tecnología se ha convertido en una herramienta esencial para asegurar el cumplimiento de rigurosos estándares de calidad, sostenibilidad y responsabilidad social. En consecuencia, aquellos candidatos que combinan habilidades tecnológicas con una perspectiva de desarrollo sostenible son altamente valorados en el sector minero peruano.
Está claro que la sostenibilidad, la responsabilidad corporativa y la inclusión están en el centro de atención, y la capacidad del sector minero para evolucionar y atraer al talento joven será determinante para su éxito a largo plazo. Las empresas mineras líderes en Perú ya están reconociendo esta realidad y están invirtiendo en crear planes de carrera que ofrecen oportunidades de crecimiento profesional y personal, formación continua, programas de mentoría, promoviendo una cultura laboral inclusiva, diversa y sostenible. Los empleadores mineros, y de la industria en general, son más conscientes de que la atracción y retención de jóvenes talentos ya no es solo una cuestión de ofrecer salarios competitivos, sino de presentar una visión y un propósito que resuene con las aspiraciones y valores de las nuevas generaciones.